entrenamiento para trinity de deep

 

**La cuenta regresiva se postraba sobre sus víctimas humanas a la hora del asecho. Hordas y hordas de personas mutiladas en un pánico y desesperanzador aullido de muerte.

 Aquellas voces que violentamente confrontaban la realización del final de su existencia, demarcaban un sufrimiento elevadísimo e inevitable, como si una tortura eterna antes del perecer definitivo bloqueara la salida  hacia el  final del camino en la espera del acogedor descanso.

El verdadero infierno era cruelmente desatado por la divina revelación del más grande y atroz de los demonios sobre los nefastos senderos que allí encubrían la tierra. Su poder era abrumador, tanto, que el control sobre la joven muchacha, perdía desproporcionadamente la voluntad de su razonamiento humano, nublándola así, de toda posibilidad que autoconservase su inminente destino mientras moraba por el averno de los malditos.

Mientras tanto, en esos precisos instantes, sobre el cadáver de aquel pobre y desdichado demonio, al cual se le arrebato algo más que la simple vida, comenzaban a emerger centenales de bellísimas mariposas a raíz de los engendrados parásitos que fueron dejados tras su muerte. Esto parecía ser responsable de un extraño metabolismo sufrido por aquel virus, marcado por la autenticidad de esa espeluznante daga, por lo que ya pasado el tiempo, aquellos asquerosos gusanos que fríamente devoraron la carne del condenado, fueron transformados en las encantadoras mariposas que allí mismo un infierno empudrecido pudo contemplar.

Con este ejemplar acontecer, una macabra risa engullecía de lleno la voluntad de la joven Trinity, arrojándola hacia la oscura fosa que yace en el interior de su fiel sombra. Al parecer, aquella dama de blanco, había tomado por posesión el alma de su mortal portadora, por lo que hacerse con el control de su voluntad seria una tarea sumamente sencilla. De esta manera, su ilustre trabajo consistiría próximamente en enseñar el camino hacia una prudente salida.

Inmediatamente, aquella sombría figura fue desvaneciéndose a través del peculiar enjambre de mariposas que fielmente atadas a su alma, despertaron la inquietud necesaria para sobrevolar un excéntrico despliegue, evadiendo la tempestad atmosférica generada por su ilustrísima santidad. Con esta maniobra ejecutada, su precipitada esencia fue llevada velozmente lejos de aquel espantoso ardor infernal, por lo que su única salida fue puesta sobre su principal objetivo desde el inicio… La puerta sagrada.

Un vasto escenario demarcado por la eminencia de sus misterios, así como camuflados bajo el macizo poder de una terrible puerta de concreto, imposible de atravesar por medios comunes, por lo que dicha entrada permanecería cerrada ante visitantes del exterior.  Desgraciadamente, la meticulosidad no siempre suele estar presente en cada detalle otorgado, por lo que pequeñas brechas casi impermisibles dejarían al margen una exitosa huida para la afortunada muchacha que ensimismada por el tormento, escapaba de las garras de la perdición ayudada por su letal sombra asesina. Nadie podría imaginar que una situación de este calibre fuese a desenvolverse de esta manera, puesto que rara vez un enjambre mueve los hilos de la historia a voluntad de un ente endemoniado. **

**El telón se alistaba ante la llegada de la verdad, el momento de actuar se aproximaba a su realización, todo parecía indicar que el final del camino estaría pronto en su límite. Aquel tétrico salón detrás de la puerta, opacado por su vislumbrante pureza, parecía demarcar el final del recorrido por la joven muchacha que a duras, si había podido escapar precipitada y enturvesida de su condena. 

Aquellos terrenos ya abandonados por el tiempo, difícilmente guiarían su próximo camino por el sendero de la oscuridad, por lo que a cada paso dado, un suspiro de inquietud tornaba su mente de ansiedad, puesto que ya las opciones se habían disipado al intentar escapar del dios del averno.

No hay peor destino que el que la misma suerte dicta al camino, por lo que una fría cautela al deambular por sus tierras fue envuelta hasta la perplejidad absoluta. Ya no parecía haber lugar a donde huir, los innumerables pasajes a escoger parecían discernir en una sola esquina, sería esta la muerte? O tal vez solo el inicio de algo nuevo. Lo cierto era que, mientras el apresurado marchar de la joven era puesto sobre las ultimas escalinatas del mismísimo templo sagrado, nuevamente aquella espeluznante presencia revelo sus finos intereses frente a sus ojos, postrado en lo alto de su llamativo trono junto a sus invaluables piezas de colección como lo eran sus literarios libros y su excéntrico gusto por tal arte . Con esto, solo quedaba resguardar el destino en una pregunta… “que es la vida?”

**Parece interminable, como si un horizonte al cual nunca llegar, evidenciando su extenso e inacabado camino, así, la luz se alza por sobre la oscuridad y viceversa, en un continuo despliegue de fuerzas naturales... el vacio y su contorno, el agua y el fuego, el yin y el yang, siempre de contracara, expuestas la una de la otra como si de su eterna rivalidad emergiera la vida misma. Es así como del caos emerge el cosmos, el orden se efectúa finamente hasta alcanzar los niveles más elevados de vida y su conciencia deambulante.

Es por ello, que el cálido ardor que el universo nos brinda desde su eternidad, hace ilustre nuestra campaña por el más grande misterio jamás existente, vivenciado cada día con el simple contemplar de nuestros acontecimientos. Por esta razón es que  solo en su valoración más excéntrica y alocada somos capaces de percibir nuestra grandeza como seres vivientes de una conciencia contemplativa de todo lo emanado por la misma creación que nos impregna el destino.

De esta forma, alzando la vos e irrumpiendo el silencio de aquel acallado lugar, la damisela de blanco se atrevió a osar corregir aquella conversación mediante impertinentes palabras llenas de furia y egocentrismo, como si intentara negar toda explicación posible de su antecesor y dios infernal

off: empecemos

**La grandeza sostenida por un mundo aparente, lleno de presagios y misterios, nos es dado a través un muro que va mas allá de las fronteras de nuestra imaginación. Una muralla de concreto que bloquea el paso a lo que una vez predefinido, no puede escapar, un abstracto bloque unido a la inexistencia que niega el transitorio pesar de una forma de vida a otra. Es así como día a día, vivimos enceguecidos por las rutinarias experiencias que nos engrandecen para ocultarnos lo que nuestro diminuto ser es ante la luz, la luz de la verdad. Una verdad que difícilmente valdría la pena concientizar. De esta manera, vivos y muertos permanecen aislados en paralelas existencias, demarcando el final así como el principio de lo que tan solo es un transitorio resguarde, negado hasta el momento de su comprensión, hasta que ya no hay más que comprender, así, la vida nos mueve por sus finos hilos hasta la muerte, en donde somos despojados de todo lo evidenciado, para poder cumplir nuestro camino, por los senderos de otro mundo en el cual solo somos el títere de algo mas grande.

Tanto la mortalidad del cuerpo como la trascendencia del alma, se aferran la una de la otra mediante el consuelo de un nefasto mundo al cual acudir sin libertad alguna, encarcelados en una prisión de carne y motivados por una voluntad invisible, vacía de indagaciones concretas, pero rellena de formaciones abstractas. Es así como la voluntad de la joven Trinity, permanece fielmente atada junto a la sombre de lo que alguna vez fue su presagio mas divino conocido como el espectro resguardante de su poder.

De esta forma, los conocimientos de diferentes mundos y vivencias paralelas, se funden en un solo sitio, albergado por el vacio de un hueco sin relleno que estorbe, maniobrado a la libertad de una solemne voluntad que guie hacia nuevas fronteras por el amplio espacio. Así, el control se hace con la joven allegada a los infiernos de un desolado señor, listo para marchar un letargo inminente, pero no sin antes esperar su respuesta, una respuesta digna de todo aquel corrupto deseo de poder y grandeza, así, esa bella muchacha inclina sus fieles palabras ante su dios pronunciando…

**La extenuada luminiscencia albergada en aquel sitio, demarcaba a momentos el advenimiento de un profundo sueño… un sueño del cual difícilmente despertaría nuevamente, por esta misma razón, los preparativos debían hacerse con la máxima cautela posible, por lo que un error, cortaría las encadenadas riendas con las que el destino aseguraba aquella partida. Y no era para menos, ya que por lo pronto, el destino residía en manos de nuevas experiencias, jóvenes ante la vida, y opacadas ante la muerte. Con esto en marcha, el legendario cometido del averno, pasaría a formar parte de una joven y demoniaca mujer a quien el reí del inframundo puso sus ojos.

Aquel tan peculiar par ocular, había desatado el rojizo carmesí de su aclamado contorno, con ello, su fuerza tornó un giro inesperado, la abrumadora luminiscencia volcó un apocalíptico y sanguíneo tono por sobre toda la habitación. Este era sin duda el poder del dios del inframundo, una elocuencia eficazmente voraz con la que repentinamente sintonizaba a su próximo legajo, mejor conocido como el espectro de la Deep.

Por lo pronto, Una fluyente sintonía en este par de rojizas miradas persuadía mucho más que cualquier discurso dado con palabras, paresia ser como si una extraña energía se viese implicada en la conexión de estos aterradores sujetos. De momentos, esa fuerza espectral con la que colisionaban sus miradas, daba a comprender quizá los conocimientos más asombrosos del mundo a la mano de siquiera milésimas de segundo, algo increíblemente inimaginable para seres ordinarios, puesto que la joven Trinity o mejor dicho su sombría figura, volaba por un espacio fuera del tiempo y la vanidad de la conciencia.**