Ficha de Falkon de Grifo
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Ficha de Falkon de Grifo
PARÁMETROS FÍSICOS Y PSICOLÓGICOS:
Nombre: Falkon
Edad: 20 años
Sexo: Masculino
Nacionalidad: Española, procedente de Los infiernos (Torre Pacheco)
Signo: Virgo
Elementos: Tierra y Fuego
Aspecto:
De complexión atlética, 1,90, 85 kilos. Pelo grisáceo largo y ojos grises de mirada segura y decidida. Piel blanca sin marca alguna.
Perfil Psicológico:
Confiado, seguro de sí mismo, algo egocéntrico, mira a todos por encima del hombro incluido a sus compañeros. Prepotente, cree que nadie le puede ganar. Fiel si se le da razones para serlo, con gran capacidad de liderazgo y convicción en lo que hace y representa.
HISTORIA:
Nombre: Falkon
Edad: 20 años
Sexo: Masculino
Nacionalidad: Española, procedente de Los infiernos (Torre Pacheco)
Signo: Virgo
Elementos: Tierra y Fuego
Aspecto:
- Spoiler:
De complexión atlética, 1,90, 85 kilos. Pelo grisáceo largo y ojos grises de mirada segura y decidida. Piel blanca sin marca alguna.
Perfil Psicológico:
Confiado, seguro de sí mismo, algo egocéntrico, mira a todos por encima del hombro incluido a sus compañeros. Prepotente, cree que nadie le puede ganar. Fiel si se le da razones para serlo, con gran capacidad de liderazgo y convicción en lo que hace y representa.
HISTORIA:
Falkon nació un 3 de Septiembre en la localidad murciana de Los Infiernos (Torre-pacheco). Fué un día típico del verano español de la costa levantina, calor fuerte y asfixiante, humedad alta y cargada, y tranquilidad que invitaba al pensamiento y a la reflexión. No fue un parto fácil para su madre, Los Infiernos no tenían un nivel alto de vida para poder ir a un hospital se tenían que desplazar a la ciudad. La familia de Falkon no tenía muchos recursos por lo que sus padres decidieron tenerlo en su propia casa, con la ayuda de sus vecinas vino a la vida la criatura. Su piel clarita y rosadita y su amplia sonrisa hicieron olvidar las penurias a sus padres, que orgullosos corrieron por el pueblo para anunciar la buena nueva.
Los primeros años de Falkon fueron buenos y bonitos, al ser hijo único tenía toda la atención de sus familiares. Sus padres eran campesinos y cultivaban la tierra de sol a sol, con el sudor de su frente y la fuerza de sus manos se ganaban la vida honradamente. Pronto se familiarizó con el oficio el pequeño Falkon que con gran habilidad manejaba el tractor con el que hacia los surcos para plantar las semillas. Sin grandes sobresaltos y en gran armonía creció el joven en Los Infiernos.
Su vida cambió aquella mañana de Abril, como cada día bien temprano Falkon agarró su tractor para empezar la faena. Las primeras horas eran las más importantes, pues luego con el sol del mediodía la tarea se hacía mucho más dura. Sumergido en su trabajo pasó el tiempo ajeno a todo lo que ocurría a su alrededor, unos extraños individuos aparecieron de improvisto en el pueblo. Por lo visto eran enviados por el dueño de la tierra para cobrar su tributo. Los últimos años habían sido duros en la región, una gran sequía había provocado que las cosechas no llegaran a ser suficientemente productivas y los campesinos no sacaron suficiente dinero para hacer frente a los pagos. El dueño de la tierra pactó con ellos una prórroga de dos años, pero era algo bastante difícil de conseguir por lo que decidió pasar a la acción de forma violenta mandando a sus matones a realizar un trabajo de intimidación. Para mandar un aviso decidieron castigar a una familia, y entre todas ellas escogieron a los padres de Falkon.
Apresándolos en su propia casa los ataron de pies y manos para ejecutarlos, pero los gritos de su madre alertaron al joven tractorista. Corriendo como alma que lleva el diablo intentó frenar el asesinato lanzándose contra los captores, éstos lo redujeron inmediatamente y lo pusieron junto a sus padres. Todo parecía perdido, cerrando los ojos intentó encontrar el valor suficiente para poder reaccionar ante lo que parecían ser los últimos minutos de su vida. En la negrura de su mente comenzó a escucharuna extraña vocecita que le decía: -¿Buscas Valor?, yo te lo puedo dar…, sólo tienes que pedirlo.-Falkon intentaba encontrar explicación a lo que le estaba sucediendo, pero no tenía tiempo, así que siguió pensando, la voz le volvió a hablar para indicarle que si quería valor sólo tendría que gritarlo, pero que como todo en la vida, tendría unas consecuencias, no para su familia, pero si para él. Estaba decidido, haría lo que fuera por salvar a su familia, así que gritó con fuerzas: -¡Valor!-. Imbuido en una extraña energía se desató de sus ataduras y dio muerte a sus captores, en un espectáculo sangriento mutiló y decapitó a todos,no quedó ni uno. Sus padres asustados comenzaron a llorar y a mirarse el uno al otro, contentos por estar salvados corrieron a abrazar a su hijo, al llegar a él se dieron cuenta de que algo iba mal. Falkon en el suelo estaba totalmente inmóvil, en su pecho una marca extraña con la forma de un Grifo, mitad león, mitad águila. Sus padres lloraron durante días y semanas su muerte, lamentándose de su mala suerte y de haber perdido a su único hijo se pasaron el resto de sus tristes vidas, de aquella manera valiente Falkon dejó éste mundo, o eso pareció en aquél lugar…
**Falkon llegó al Meikai totalmente desorientado y confundido, no sabía exactamente donde se encontraba y como continuar. Tras pasar por la puerta del infierno y el Río Aquerón comprendió realmente donde se encontraba, solo buscaba algo que lo guiara en su nuevo camino. Tras llegar a una zona donde podía ir a varios sitios, un destello fué lo que decantó su siguiente paso, iría hacía una extraña cabaña elevada. Una vez allí se encontró con un demonio de alto rango, que para probar si era digno de pertenecer al ejército de Hades le encomendó la tarea de ir al Monte Yakushu por el Cofre de la Muerte, una tarea de la que nadie había sobrevivido. El demonio desapareció y dejó a Falkon en un mar de incertidumbre, menos mal que llegó para guiarlo Bernard, un extraño compañero que más adelante se convertiría en su verdadero rival. Bernard lo guió hasta la puerta de las ruinas donde se encontraba el cofre, pero en vez de acompañarlo lo esperó a las afueras, al acecho. Falkon entró en la ruinas y pasó la prueba de los dos dragones guardianes, Furor y Avalancha, los cuales le hicieron pasar primero por dos durísimos acertijos para luego dejarle el camino libre hacia el cofre, la morada del verdugo del Meikai, la muerte. El joven se apresuró a la entrega, pero a las afueras lo estaba esperando Bernard, en su verdadera forma, dispuesto a arrebatarle el cofre. Tras una durisima lucha encarnizada, y cuando todo parecía perdido para Falkon consiguió despertar el 8º sentido, aquél que distingue a los verdaderos guerreros del Inframundo. Tras despertar su verdadero poder el combate era innecesario, Bernard asumió su derrota y le ayudó a regresar a la cabaña creando una brecha temporal.**
**Una vez llegado a la cabaña Falkon esperó a que apareciera el morador de la cabaña para entregarle orgulloso el Cofre de la Muerte. Tras una larga espera apareció de nuevo para compronar la proeza.**
Demonio:-Vaya, vaya, así que realmente eres el elegido, has traido el importante Cofre de la Muerte para demostrar tu verdadero valor. Sinceramente no esperaba verte de nuevo, pensaba que serías eliminado como muchos otros antes que tú. Hubo algo que debí advertir la primera vez que te vi, y es esa marca que tienes en el pecho, la marca de Grifo, uno de los Jueces del Inframundo. Por lo visto te ha elegido para que seas su portador. Has sido capaz de despertar el 8º sentido, es por ello que eres digno de portarla, es más lo puedes comprobar tu mismo. ¡Mira como vibra cuando estás a su lado!.-
**La Kyoto de Grifo comenzó a brillar con alta intensidad, la energía que desprendía era de un poder altísimo, se podía ver con detalle como cada una de sus partes parecía estar dotada de vida misma, y todo con la presencia de Falkon, su orgulloso portador. El muchacho de pelo gris al ver su nuevo destino se emocionó profundamente, estaba preparado para ser uno de los guerreros más poderosos de Hades. Arrodillado esperó a la bendición del demonio para empezar su nueva vida.**
Demonio:-Falkon de Grifo, desde éste mismo momento te convierto en Juez del Inframundo, tu valor y determinación han sido claves para que te unas a nuestro ejército poderoso. Cómo uno de sus lideres esperamos mucho de tí, no nos falles. Adiós nuevo Juez, nos veremos pronto, disfruta de tu nueva posición.-
**El demonio desapareció de la misma manera en la que vino, Falkon armado con su nueva Kyoto lucía imponente, señorial, como un verdadero Juez. Una nueva etapa comenzaba para el joven, orgulloso, esperaba no defraudar a su nuevo Señor.**
Los primeros años de Falkon fueron buenos y bonitos, al ser hijo único tenía toda la atención de sus familiares. Sus padres eran campesinos y cultivaban la tierra de sol a sol, con el sudor de su frente y la fuerza de sus manos se ganaban la vida honradamente. Pronto se familiarizó con el oficio el pequeño Falkon que con gran habilidad manejaba el tractor con el que hacia los surcos para plantar las semillas. Sin grandes sobresaltos y en gran armonía creció el joven en Los Infiernos.
Su vida cambió aquella mañana de Abril, como cada día bien temprano Falkon agarró su tractor para empezar la faena. Las primeras horas eran las más importantes, pues luego con el sol del mediodía la tarea se hacía mucho más dura. Sumergido en su trabajo pasó el tiempo ajeno a todo lo que ocurría a su alrededor, unos extraños individuos aparecieron de improvisto en el pueblo. Por lo visto eran enviados por el dueño de la tierra para cobrar su tributo. Los últimos años habían sido duros en la región, una gran sequía había provocado que las cosechas no llegaran a ser suficientemente productivas y los campesinos no sacaron suficiente dinero para hacer frente a los pagos. El dueño de la tierra pactó con ellos una prórroga de dos años, pero era algo bastante difícil de conseguir por lo que decidió pasar a la acción de forma violenta mandando a sus matones a realizar un trabajo de intimidación. Para mandar un aviso decidieron castigar a una familia, y entre todas ellas escogieron a los padres de Falkon.
Apresándolos en su propia casa los ataron de pies y manos para ejecutarlos, pero los gritos de su madre alertaron al joven tractorista. Corriendo como alma que lleva el diablo intentó frenar el asesinato lanzándose contra los captores, éstos lo redujeron inmediatamente y lo pusieron junto a sus padres. Todo parecía perdido, cerrando los ojos intentó encontrar el valor suficiente para poder reaccionar ante lo que parecían ser los últimos minutos de su vida. En la negrura de su mente comenzó a escucharuna extraña vocecita que le decía: -¿Buscas Valor?, yo te lo puedo dar…, sólo tienes que pedirlo.-Falkon intentaba encontrar explicación a lo que le estaba sucediendo, pero no tenía tiempo, así que siguió pensando, la voz le volvió a hablar para indicarle que si quería valor sólo tendría que gritarlo, pero que como todo en la vida, tendría unas consecuencias, no para su familia, pero si para él. Estaba decidido, haría lo que fuera por salvar a su familia, así que gritó con fuerzas: -¡Valor!-. Imbuido en una extraña energía se desató de sus ataduras y dio muerte a sus captores, en un espectáculo sangriento mutiló y decapitó a todos,no quedó ni uno. Sus padres asustados comenzaron a llorar y a mirarse el uno al otro, contentos por estar salvados corrieron a abrazar a su hijo, al llegar a él se dieron cuenta de que algo iba mal. Falkon en el suelo estaba totalmente inmóvil, en su pecho una marca extraña con la forma de un Grifo, mitad león, mitad águila. Sus padres lloraron durante días y semanas su muerte, lamentándose de su mala suerte y de haber perdido a su único hijo se pasaron el resto de sus tristes vidas, de aquella manera valiente Falkon dejó éste mundo, o eso pareció en aquél lugar…
**Falkon llegó al Meikai totalmente desorientado y confundido, no sabía exactamente donde se encontraba y como continuar. Tras pasar por la puerta del infierno y el Río Aquerón comprendió realmente donde se encontraba, solo buscaba algo que lo guiara en su nuevo camino. Tras llegar a una zona donde podía ir a varios sitios, un destello fué lo que decantó su siguiente paso, iría hacía una extraña cabaña elevada. Una vez allí se encontró con un demonio de alto rango, que para probar si era digno de pertenecer al ejército de Hades le encomendó la tarea de ir al Monte Yakushu por el Cofre de la Muerte, una tarea de la que nadie había sobrevivido. El demonio desapareció y dejó a Falkon en un mar de incertidumbre, menos mal que llegó para guiarlo Bernard, un extraño compañero que más adelante se convertiría en su verdadero rival. Bernard lo guió hasta la puerta de las ruinas donde se encontraba el cofre, pero en vez de acompañarlo lo esperó a las afueras, al acecho. Falkon entró en la ruinas y pasó la prueba de los dos dragones guardianes, Furor y Avalancha, los cuales le hicieron pasar primero por dos durísimos acertijos para luego dejarle el camino libre hacia el cofre, la morada del verdugo del Meikai, la muerte. El joven se apresuró a la entrega, pero a las afueras lo estaba esperando Bernard, en su verdadera forma, dispuesto a arrebatarle el cofre. Tras una durisima lucha encarnizada, y cuando todo parecía perdido para Falkon consiguió despertar el 8º sentido, aquél que distingue a los verdaderos guerreros del Inframundo. Tras despertar su verdadero poder el combate era innecesario, Bernard asumió su derrota y le ayudó a regresar a la cabaña creando una brecha temporal.**
**Una vez llegado a la cabaña Falkon esperó a que apareciera el morador de la cabaña para entregarle orgulloso el Cofre de la Muerte. Tras una larga espera apareció de nuevo para compronar la proeza.**
Demonio:-Vaya, vaya, así que realmente eres el elegido, has traido el importante Cofre de la Muerte para demostrar tu verdadero valor. Sinceramente no esperaba verte de nuevo, pensaba que serías eliminado como muchos otros antes que tú. Hubo algo que debí advertir la primera vez que te vi, y es esa marca que tienes en el pecho, la marca de Grifo, uno de los Jueces del Inframundo. Por lo visto te ha elegido para que seas su portador. Has sido capaz de despertar el 8º sentido, es por ello que eres digno de portarla, es más lo puedes comprobar tu mismo. ¡Mira como vibra cuando estás a su lado!.-
**La Kyoto de Grifo comenzó a brillar con alta intensidad, la energía que desprendía era de un poder altísimo, se podía ver con detalle como cada una de sus partes parecía estar dotada de vida misma, y todo con la presencia de Falkon, su orgulloso portador. El muchacho de pelo gris al ver su nuevo destino se emocionó profundamente, estaba preparado para ser uno de los guerreros más poderosos de Hades. Arrodillado esperó a la bendición del demonio para empezar su nueva vida.**
Demonio:-Falkon de Grifo, desde éste mismo momento te convierto en Juez del Inframundo, tu valor y determinación han sido claves para que te unas a nuestro ejército poderoso. Cómo uno de sus lideres esperamos mucho de tí, no nos falles. Adiós nuevo Juez, nos veremos pronto, disfruta de tu nueva posición.-
**El demonio desapareció de la misma manera en la que vino, Falkon armado con su nueva Kyoto lucía imponente, señorial, como un verdadero Juez. Una nueva etapa comenzaba para el joven, orgulloso, esperaba no defraudar a su nuevo Señor.**
**Tras averiguar por medio de las ánforas del Templo Oscuro del Inframundo el lugar destinado a cumplir sus deseos se puso rápidamente en acción, rumbo al Monasterio oculto de Sant’Angelo. Allí los monjes que guardaban celosos el ritual iniciático para despertar poderes ocultos en las personas lo prepararon para la ocasión. Atado de pies y manos fué cortado para que su sangre activara el proceso de no retorno, el viaje hacía su pasado.**
**Tras una caída al más absoluto de los vacíos llegó a Los Infiernos, su pueblo natal. Nada había cambiado desde que estuvo allí la última vez, aquél día en que dejó el mundo de los humanos para reunirse con su señor Hades. Tras comprobar que sus padres se encontraban bien, y que todo seguía con la normalidad habitual de aquél momento tuvo la visita de Erde, el Maestro del Elemento Tierra. Éste le dijo que para despertar el Elemento que siempre estuvo presente en su vida sólo tenía que hacer una cosa, matar a sus padres. Falkon, sumido en un lógico mar de dudas no lo veía claro, hasta que viendo que los presagios de aquél Maestro empezaban a ocurrir pasó a la acción. Con los movimientos ejecutores de un verdadero verdugo quitó la vida de ambos, su madre, antes de desaparecer, le dijo que hacía lo correcto, que pronto se reunirían los tres en el Inframundo, para no separarse nunca. Erde apareció de nuevo para felicitarlo por la decisión, a la vez que le comunicaba que seguía siendo un alma en pena, y que como cuál, tendría que encontrar un nuevo huésped y hacerle despertar el octavo sentido para regresar al Inframundo.**
**El Juez de Grifo pasó tiempo buscando esa persona idónea, hasta que, movido por su instinto, la encontró en Rache, el hijo del asesino de sus padres. No le fué difícil introducirse en su sed, desde su interior movió sus hilos para provocar su despertar. Rache, en una auténtica locura por la situación con sus padres, agarró un hacha, y con ella en mano fué al despacho de su padre que no lo esperaba, tras cortarle el cuello vió como su apreciada madre hacía acto de presencia en la dantesca situación. Falkon de una manera muy hábil provocó, que el disparo desesperado del padre de Rache acabara con la vida de la mujer. Éste hecho provocó que la rabia se apoderara del chico haciéndole despertar el octavo sentido. Ya que el control total del chico, Falkon le dedicó unas últimas palabras al asesino Schuldig, se vería pronto para el verdadero castigo. De esta manera el Juez encontró un nuevo cuerpo liberado y con el octavo sentido para entrar de nuevo en el Inframundo.**
**Al poco tiempo de llegar tuvo una nueva visita, Feuer, el Maestro del Elemento Fuego. Éste, al verlo la persona perfecta para despertar el nuevo poder le comunicó, que para poder hacer uso del mismo debería ir a Roca Magma con su sirviente Fidel, y traer uno de los cuernos del demonio milenario que habitaba en el volcán. Tras muchas calamidades fueron capaces de llegar al interior, allí los esperaba Teufel, con su espada “Flamme”. En un combate magnifico en las que el demonio tenía todas las de ganar, apareció Fidel, que insuflado con el valor que le dieron las palabras del Juez se lanzó sobre el demonio, éste, al intentar quitárselo de encima se cortó un cuerno. La misión se había cumplido y Feuer hizo acto de aparición, realmente nunca se había ido, el era el mismo Teufel. Felicitando a los dos por la hazaña despertó en Falkon el Elemento Fuego. Con los dos elementos despertados comenzó el nuevo camino de la Leyenda, Falkon, el Juez de Grifo.**
**Tras una caída al más absoluto de los vacíos llegó a Los Infiernos, su pueblo natal. Nada había cambiado desde que estuvo allí la última vez, aquél día en que dejó el mundo de los humanos para reunirse con su señor Hades. Tras comprobar que sus padres se encontraban bien, y que todo seguía con la normalidad habitual de aquél momento tuvo la visita de Erde, el Maestro del Elemento Tierra. Éste le dijo que para despertar el Elemento que siempre estuvo presente en su vida sólo tenía que hacer una cosa, matar a sus padres. Falkon, sumido en un lógico mar de dudas no lo veía claro, hasta que viendo que los presagios de aquél Maestro empezaban a ocurrir pasó a la acción. Con los movimientos ejecutores de un verdadero verdugo quitó la vida de ambos, su madre, antes de desaparecer, le dijo que hacía lo correcto, que pronto se reunirían los tres en el Inframundo, para no separarse nunca. Erde apareció de nuevo para felicitarlo por la decisión, a la vez que le comunicaba que seguía siendo un alma en pena, y que como cuál, tendría que encontrar un nuevo huésped y hacerle despertar el octavo sentido para regresar al Inframundo.**
**El Juez de Grifo pasó tiempo buscando esa persona idónea, hasta que, movido por su instinto, la encontró en Rache, el hijo del asesino de sus padres. No le fué difícil introducirse en su sed, desde su interior movió sus hilos para provocar su despertar. Rache, en una auténtica locura por la situación con sus padres, agarró un hacha, y con ella en mano fué al despacho de su padre que no lo esperaba, tras cortarle el cuello vió como su apreciada madre hacía acto de presencia en la dantesca situación. Falkon de una manera muy hábil provocó, que el disparo desesperado del padre de Rache acabara con la vida de la mujer. Éste hecho provocó que la rabia se apoderara del chico haciéndole despertar el octavo sentido. Ya que el control total del chico, Falkon le dedicó unas últimas palabras al asesino Schuldig, se vería pronto para el verdadero castigo. De esta manera el Juez encontró un nuevo cuerpo liberado y con el octavo sentido para entrar de nuevo en el Inframundo.**
**Al poco tiempo de llegar tuvo una nueva visita, Feuer, el Maestro del Elemento Fuego. Éste, al verlo la persona perfecta para despertar el nuevo poder le comunicó, que para poder hacer uso del mismo debería ir a Roca Magma con su sirviente Fidel, y traer uno de los cuernos del demonio milenario que habitaba en el volcán. Tras muchas calamidades fueron capaces de llegar al interior, allí los esperaba Teufel, con su espada “Flamme”. En un combate magnifico en las que el demonio tenía todas las de ganar, apareció Fidel, que insuflado con el valor que le dieron las palabras del Juez se lanzó sobre el demonio, éste, al intentar quitárselo de encima se cortó un cuerno. La misión se había cumplido y Feuer hizo acto de aparición, realmente nunca se había ido, el era el mismo Teufel. Felicitando a los dos por la hazaña despertó en Falkon el Elemento Fuego. Con los dos elementos despertados comenzó el nuevo camino de la Leyenda, Falkon, el Juez de Grifo.**
- Fidel's Side History:
- En las profundidades del Imperio Submarino de Poseidón no todo eran marinas y escamas, como cualquier reino que se tercie tenía sus habitantes naturales, los descendientes de los que una vez vivieron en la Atlántida, los Atlantes. Estos seres tenía una cultura muy avanzada y se asentaban en los restos de lo que fué una de las civilizaciones más prolíferas en la historia del mundo. Sus vidas eran tranquilas y apacibles, disfrutando de las riquezas que el fondo marino les proporcionaba, y la protección del dios Poseidón les concedía. Su sociedad estaba dividida en varias clases diferenciadas: Los comerciantes que incluso tenían contacto con los pueblos costeros del exterior; los guerreros, que desde pequeño eran entrenados en los distintos templos destinados para ello; los religiosos, que veneraban y ofrecían rituales al dios de los mares; y por último una base que se ocupaba de tareas menores y complementarias. Todos sabían desde su nacimiento cuáles eran sus obligaciones y cuáles sus derechos, vivían en absoluta armonía y no había conflictos de especial relevancia.****En este clima nació en el seno de una familia humilde Fidel, el quinto hijo de un matrimonio que se encargaba de una pequeña granja de Hipocampos. Éstos animales eran muy conocidos en el Imperio, y como caballos terrestres, eran utilizados como medio de transporte, y para tareas de requerimientos físicos importantes. Sus padres rápidamente le pusieron Fidel que en su idioma quería decir: “el último”. Ya en un estado de avanzada edad consideraban que con cinco vástagos era más que suficiente para controlar la granja sin necesidad de contratar a nadie. No tenían escasez de cosas, pero lo que tenían era fruto del largo y agotador trabajo diario, un trabajo que duraba duras jornadas de más de doce horas. Fidel, creció educado por su hermana mayor, Daniela. Ésta se encargaba de las tareas domésticas y de que todo en la casa estuviera en perfecto orden. Como sus padres se pasaban el día en las distintas funciones de una granja de Hipocampos apenas tenían tiempo de estar junto a su pequeño, por lo que su verdadera madre fue su hermana, siempre atenta para que no le faltara nada.****Fidel creció en un hogar donde el cariño, el respeto y el amor entre ellos se respiraba en todos los rincones. Desde muy pronto destacó por su gran simpatía, su sonrisa permanente, y su gran capacidad para actuar de manera impulsiva costara lo que costara. Era un niño risueño y encantador que hacía la vida más llevadera a todos sus familiares. Cuando alcanzó una edad adecuada se le dio un pequeño rebaño de Hipocampos para que los cuidara y se encargara de ellos. Él los cogía muy temprano y los llevaba a pastar a los distintos campos cercanos a su hogar, en una responsabilidad que le gustaba mucho y hacía a la perfección. Así pasaron los meses hasta que llegaron rumores a la granja sobre la presencia de un ser de un lugar tenebroso y macabro: El Inframundo.****Los padres de Fidel enseguida prohibieron a sus hijos alejarse mucho de la granja para evitar el encuentro con un ser de estas características. Le contaron historias del Inframundo, de la muerte vestida con una armadura oscura, de un lugar de horrores y sufrimiento infinito. El chico miraba asustado a su padre mientras hablaba de estas cosas, no entendía que alguien así estuviera en los dominios de Poseidón, de hecho, no pensaba que existiera alguien así. Como era un chico obediente no se alejó de la granja durante un tiempo, hasta que el infortunio se apoderó del muchacho. En una mañana como otra cualquiera dos de sus Hipocampos se asustaron con el encuentro de una Barracuda, temiendo al castigo de sus padres fué tras ellos para capturarlos antes de que se escaparan. Pero el destino hizo acto de presencia en su vida, a pocos metros de sus criaturas se encontraba aquél ser que su padre tanto le temía, el portador de la armadura oscura.****Fidel al verlo tembló de miedo, tanto, que su corazón amenazaba con reventar de seguir así. Su armadura si era terrorífica, y la energía oscura que emitía amenazaba con hacerlo perder el sentido de la presión. Pero había algo en su rostro que indicaba lo contrario, un ser tan maligno no podía tener tanta belleza, sus ojos y su mirada enigmática y directa embrujaba a quien lo mirara. El chico corrió a esconderse para observarlo desde cierta distancia. El señor oscuro parecía estar asombrado por todo lo que lo rodeaba, incluso jugaba con algunos pececillos que curiosos, se acercaron a su lado. No había ningún gesto que indicara que era la muerte, todo lo contrario. Poco a poco fué quitándosele la sensación de miedo y temor hasta el punto, que armándose de valor, fué a presentarse en persona, no podía ser tan malo pensaba mientras se acercaba.****El señor oscuro por lo visto era un Juez del Inframundo, y estaba interesado en los Hipocampos como montura para viajar al Río Amazonas. Conmovido por el gesto de acercamiento le habló de manera amable, incluso le invitó a acompañarle bajo su protección. Fidel aceptó de inmediato, quería conocer más cosas de aquél Juez. Por el camino hablaron de muchas cosas, de sus padres, del pastoreo de Hipocampos, de su futuro, del Inframundo,….atento a todas las palabras despertó más curiosidad por conocer aquellas tierras. Sin darse cuenta llegaron a la cueva de la bestia Boyuna, una criatura de la que uno debía mantenerse alejado, y así, permaneció Fidel aconsejado por Falkon.****Pero aquello iba a ser el comienzo de su nueva vida, por lo visto la criatura legendaria quería utilizarlo para chantajear al Juez, éste, en un acto generoso le dio una muerte dulce con un rayo de energía cálida. Éste rayo lo marcó con la esencia del Juez para que, al pasar al Inframundo fuera tratado como se merecía. De esta manera dejó de existir Fidel para sus familiares, estaba sentenciado desde el mismo instante que ayudó al espectro, así que gracias a la generosidad del Juez pudo renacer como una personalidad importante en la vida de Falkon.****Fidel llegó al Inframundo como llega cualquier alma humana, en su forma, fué colocado en una larga cola que se dirigía a un abismo de enormes dimensiones. En su borde, dos demonios separaban el séquito según su criterio, algunos los apartaban para dirigirlos a las prisiones para ser juzgados, otros, eran arrojados al abismo sin contemplaciones. Poco a poco fué llegando Fidel al momento de la verdad, los demonios al verlo se apresuraron a sacarlo de la fila, llevaba la marca del Juez de Grifo. Rápidamente fué llevado a los sirvientes del Juez en la primera prisión, éstos al verlo lo adaptaron rápido a su nueva vida, le dieron ropajes adecuados, y le llevaron a un sitio donde se podía ver todo lo que estaba ocurriendo en el Reino Submarino. Desde allí pudo ver el desenlace de la misión de Falkon, también pudo ver como sus padres lloraron su muerte y el descuido al dejarlo sólo frente a alguien como el espectro de Grifo. Las autoridades de Poseidón lo consideraron una víctima más del espectro, por lo que sus padres permanecieron sin complicaciones en su granja hasta el fin de sus días. Fidel sintió una gran pena, su corazón se encontraba dolido, pero entendía que era el único camino posible. Los sirvientes le contaron que tarde o temprano los volvería a ver porque todo el mundo pasa por la primera prisión, detalle que calmó al chico, por lo menos volvería a reunirse con ellos y le pediría al Juez que los dejara vivir junto a él en su nuevo hogar.****Tras la difícil misión de su nuevo señor fué a cuidarlo mientras se recuperaba de las heridas que le había dejado su enfrentamiento contra las bestias del fondo marino. Tras tres días despertó el Juez, al ver al muchacho se alegró de encontrarlo en el sitio que quería encontrarlo. Fidel se alegró y le agradeció la oportunidad de su nueva vida, por sus palabras estaba totalmente convencido, e incluso parecía disfrutar con ello. Falkon sonrió y se recostó otro rato.****Y así llegó Fidel a la vida de Falkon. Lo acogió como sirviente y lo preparó con duros entrenamientos para que, en el futuro, fuera un espectro de gran poder e importancia. El chico observaba cuando podía los entrenamientos que su señor tenía con Ulquiorra, un demonio de aspecto inquietante que en un primer momento quería hacerlo desaparecer. Con el paso del tiempo fue adquiriendo destrezas y habilidades de combate, no muy potentes, pero si muy útiles. En su interior ansiaba el momento perfecto para ayudar a su señor, por lo que se esmeraba mucho en aprender y asimilar los conocimientos correctamente. Tras una de las múltiples salidas al exterior del Juez le llegó la oportunidad, Falkon le invitó a unirse para ir a Roca Magma, el volcán del Oeste del Inframundo. Allí tendrían que lidiar con un demonio primigenio de enorme poder, al principio del ofrecimiento le entraron serias dudas, pues aún se consideraba un lastre importante, pero tras las palabras del Kyoto de Grifo no pudo decir que no. El camino hacía Roca Magma fue terrible para el joven, el calor asfixiante era intratable, de no ser por la ayuda de su señor hubiera perecido allí mismo, pero no, alentándose él mismo fue capaz de llegar a la presencia del demonio. Una vez en el interior del volcán apenas pudo hacer nada, cuando parecía que su vida acabaría allí mismo un hábil movimiento de su señor lo salvó. Escondiéndose en un lateral se pasó todo el combate hasta que, movido en su interior por las palabras agónicas de Falkon reunió el valor para saltar y provocar que el ser primigenio se cortara un cuerno. Esa acción salvó la vida del Juez, que agradecido pudo despertar el Elemento Fuego de su cosmos. El Maestro reconoció el gran trabajo y los devolvió sanos y salvo a la Primera Prisión, con la gran satisfacción de haber trabajado como un auténtico equipo. Fidel cada día estaba más adaptado a su nueva vida, le gustaba mucho su nuevo horizonte y ansiaba el día en que se convertiría en una persona importante del Inframundo, vistiendo orgulloso una armadura de espectro del señor Hades.**
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Re: Ficha de Falkon de Grifo
ACTUALIZACIÓN DE FICHA
**El Juez Falkon no estaba satisfecho con su estado actual, por lo que decidió obtener un mayor poder y recurrir al despertar del Elemento Natural de su armadura: el Fuego. Tras visitar las ánforas del Templo Oscuro tuvo una inquietante aparición, un chamán que le indicó que su búsqueda debía empezar el los dominios del sexta prisión. Falkon caminó hacia ella con gran cautela, atravesando las tres zonas que la conforman: la laguna de sangre, donde contempló el gran estanque de sangre hirviente, luego pasó el bosque del infierno, donde pudo ver la crudeza extrema en la piel de dos pequeños niños, hasta llegar al Desierto de arena caliente. Fué en este último lugar donde se cruzó con una de las hijas del espíritu del fuego, sensual y provocativa, para probar su inteligencia le propuso dos retos, los cuáles fueron resueltos satisfactoriamente por el juez. El último de ellos le llevó a la senda del Kilimanjaro, con una tormenta de arena caliente fué transportado a sus dominios, donde le esperaba una ingrata sorpresa.**
**El Juez de Grifo se volvió mortal, algo que le inquietó en un primer momento, cansado por el peso del mundo sobre sus hombros se echó a dormir bajo la sombra de varios árboles, en ese momento una figura de León en llamas le alentó para que continuara, y se adentrara en el interior del volcán, allí se encontraría con el Templo del Fuego, el lugar donde reposaba la Piedra de Fuego, el elemento clave para el despertar de su nuevo poder. Con mucho sacrificio y dificultades se adentró en el volcán en busca del templo, pero en un primer momento no lo encontró, con la ayuda en la sombra del león descubrió un pequeño camino de adoquines que llevaba a quien lo siguiera, a la misma puerta del templo.**
**Pero el lugar donde se ubicaba la piedra estaba custodiado por un excelente guerrero, uno que había pasado mucho tiempo en aquél volcán, y que tenía unas enormes ganas de derrotar al Juez. En un épico enfrentamiento en el que cualquier paso en falso hubiera llevado a la ruina al espectro, consiguió golpearlo lo suficiente como para poder hacerlo desaparecer y obtener el valioso trofeo de la piedra. Tras ella se encontraba el león en llamas, el cuál le proporcionó una vía de escape por medio de un portal, y lo más importante, la manera de despertar el elemento natural de su armadura. Con el poder ya en sus venas se dispuso a regresar al Inframundo, dejando la piedra en su sitio particular de recuerdos acabó su epopeya, el Juez de Grifo había obtenido lo que buscaba y ahora era capaz de manejar un poder altamente destructivo, un poder con el que sus rivales padecerían en sus carnes, el poder del fuego purificador.**
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Re: Ficha de Falkon de Grifo
HISTORIA DE COMO SHIVA SE CONVIRTIÓ EN LA GUARDIANA DEL TEMPLO DEL GRIFO
- Aparición del personaje:
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**Cuentan las viejas leyendas del Norte, que en las tierras heladas del Rey Hörn, una noche de luna llena, dió a luz la reina a una bella niña. De piel blanca como la nieve, pelo del mismo tono albino, y unos grandes y preciosos ojos azules como el color del hielo en máxima congelación. Su nombre, Shiva. Fue una niña muy esperada por todos, aunque no tanto para su padre, éste, esperaba a un varón que heredara su trono y reino cuando la luz de su interior se apagara y abandonara este mundo. Las leyes del Norte eran claras en este sentido, el trono sólo podía ser heredado por el primogénito, cualquier otro vástago, no tendría derecho a reclamarlo. Esta ley dejaba en claro peligro a la niña, pues si en el futuro nacía un niño, deseo de su padre, no podría heredar el trono por no ser, el primogénito. La madre, claramente conocedora de esta cuestión, intentaba un día si, y otro también que el rey olvidara las estúpidas leyes del Norte, y se centrara en criar a una criatura que tenía todo el derecho del mundo, a recibir el cariño de sus progenitores.**
**La niña, que pronto sintió el rechazo de su padre, creció en un entorno turbulento, sin amigos, exceptuando a su madre, y con unas claras simpatías por la muerte, y todas sus formas. Se le solía ver en las cercanías del campo santo del castillo donde vivía, allí jugaba imaginando historias en las que se ponía en el papel de una gran y famosa heroína, que salvaba a todos con sus habilidades y destrezas con el arco de monstruos y villanos malvados. Las flechas, no tenían secretos para ella, durante horas jugaba en un patio cercano a sus aposentos lanzadolas contra unas dianas colocadas estratégicamente. Para ella no era más, que un juego, pero realmente sus habilidades eran extraordinarias, muy por encima de cualquier arquero del país. Su padre, que alguna vez que otra salía de caza, se mofaba de la idea de que su "amada" niña fuera capaz de alcanzar un blanco montando a caballo, sus acompañantes, que conocían de sobra las habilidades de Shiva, se jugaron con el rey una suculenta cantidad de oro. Hörn, que era famoso por su gran tozudez, no vio peligrar la apuesta y se lanzó de lleno en aceptarla. Todo quedó preparado al día siguiente para la humillación paterna, la joven, que pensaba que por una vez haría sentir a su padre orgulloso, no sólo acertó en el blanco en movimiento, sino que lo hizo varias veces, incluso, con los ojos cerrados. El griterío y sorna por la pérdida de la apuesta duró meses, en todo el reino no se hablaba de otra cosa, la hija del rey dejó en ridículo a su padre, se decían las mujeres en el río al lavar la ropa. La relación, si alguna vez la hubo, entre padre e hija llegó a su límite, éste, totalmente humillado y encolerizado mandó encerrarla en la cripta de la familia real para que pasara encerrada el resto de su vida. Su madre, que se encontraba en estado, a punto estuvo de perder el niño, ahora sí, que llevaba en su interior. Al enterarse de la noticia cayó enferma, y sólo con las artes de los más sabios del Norte pudo salvarse y dar a luz al segundo vástago del rey, Leonardo.**
**Shiva creció entonces encerrada en la cripta de su familia, en su interior, pudo repasar la historia real con todo lujo de detalles, la conquista del reino por parte de sus antepasados, las guerras internas entre clanes que terminaron cuando su abuelo los unificó, y una extraña figura rodeada de círculos grabados en la misma roca. Al principio no le prestó mucha atención, pues no entendía el porqué de su encierro permanente, pero poco a poco creyó verlas más claras cada día, como si el paso del tiempo quisiera decirle algo. De hecho, la figura poco a poco mostraba una luminosidad creciente que llegó un momento a iluminar toda la penumbrosa instancia. Shiva continuó con sus dos grandes aficiones, las flechas, y la muerte. Desde un ventanal de la cripta podía ver los enterramientos que se producían en el campo santo, llegaba incluso a imaginarse a los muertos dentro de sus ataúdes su paso por la vida, y su posterior juicio final. Eso si, ella creía ciegamente en la vida después de la muerte.**
**Cuando Shiva cumplió los 15 años, llevando ya 5 años de encierro, pasó algo que cambió su vida para siempre. Los círculos grabados generaron un espejo en el que se podía ver reflejado en su interior, una bella joven con aspecto de reina por sus joyas, su mirada dulce, su gesto angelical, todo parecía indicar que se trataba de una entidad benévola que venía a apiadarse del injusto cautiverio. Con una voz armoniosa y cálida despertó a Shiva, que sorprendida, fue al espejo a ver de lo que se trataba. Una vez allí se sorprendió por la aparición, no le tenía miedo, pues sabía que en ocasiones los muertos regresan al mundo por causas pendientes, por lo que le sonrió y dialogó con ella un buen rato. La entidad, que por lo visto venía a ayudar a escapar a Shiva, le contó una vieja historia sobre una montaña, y un arco divino que se encontraba perdido en su interior. El relato, y más al tratarse de un arco, hizo que prestara la máxima atención posible, todos los detalles, todas las pesquisas. El reflejo, antes de desaparecer, le dijo que detrás de las runas existía un pasillo, desconocido para todos por ser más antiguo incluso que el castillo, y que al final, un caballo de hielo la esperaba para llevarla a la montaña. Sus días de encierro habían acabado, por fin, se haría justicia.**
**El reflejo no era más, que la reina Nerehida, "la bruja", la antigua propietaria y soberana de los territorios que ahora pertenecían al rey Hörn y a su familia. Ella, que era famosa por su gran sabiduría y conocimientos en magia antigua, fué encerrada en el cristal en tiempos tan antiguos, que nadie vivía ahora para recordarla. Desde el primer día que nació Shiva estuvo al tanto de sus andanzas, la encontró el huésped perfecto para lograr su ansiada venganza, día a día estuvo planeando el momento perfecto para hacer su aparición, sin ruido, sin prisas, esperó a que cumpliera la edad perfecta para que fuera a por su arco, "Dardo helado", una vez que la joven se hiciera con el, todo sería más fácil, pues el arco contenía parte de la esencia maléfica de la reina. Shiva no esperó mucho tiempo para escapar de la cripta, poco le importó el origen de su montura helada, eran más las ansias por liberarse que las de pensar en cosas más realistas, nada más abandonar su encierro, Nerehida desapareció riendo con gran estruendo, por fin, volvería a castigar a los que la hicieron abandonar la Tierra.**
**El caballo, como no podía ser de otro modo, no era más que un sortilegio antiguo generado por la bruja, sin sufrir cansancio, sin frenarse ante nada, ni nadie, llegó a su destino a una velocidad anormal, Shiva, que nunca había salido del castillo, se sorprendió al ver la belleza de los parajes helados del reino, mucho más bonitos de lo que jamás se hubiera imaginado. La montaña, de un tamaño descomunal, parecía esperarla engalanada, como si de un regreso esperado fuera. La montura, tampoco se detuvo al llegar a su falda, con una habilidad de otro mundo, escaló por sus finos desfiladeros hasta llegar a la zona más profunda, al corazón mismo de la montaña. Una vez allí desapareció en la misma nada, dejando a la joven a las puertas de un pequeño recoveco oscuro que tenía en el fondo el esperado arco, "Dardo helado" que acechaba para volver de nuevo a la acción. Shiva, como si lo estuviera esperando desde el mismo momento en que nació, lo agarró con fuerza, su brillo iluminó el interior de la montaña con un azul fulgurante, la conexión entre la bruja y la joven fué instantánea, como si estuvieran predestinada desde un inicio. La magia antigua hizo de nexo, las runas comenzaron a brillar en el arco, transmitiendo todos sus conocimientos. Cuando la transmisión finalizó, el tránsito había sido completado, ambas almas se fusionaron para formar una persona nueva, una con la parte malvada y calculadora de la bruja, y la parte benévola y pura de la joven, una combinación inigualable.**
**Shiva ya no sería la misma desde aquél día, a sus habilidades potenciadas con el arco se le unieron las de la bruja, la magia arcana. Con el tiempo llegó a controlar la sabiduría alcanzada para convertirse en algo parecido a una diosa primigenia del hielo, pero eso fué mucho más adelante. Nada más salir de la montaña fué a cumplir la venganza de la mujer del espejo, esperó al momento perfecto para regresar a su castillo, en su mente la idea de aniquilar a toda su familia, en parte movida por su parte mala, y en parte por el odio acrecentado hacia su padre, su madre, que ya no estaba entre los vivos, era el único recuerdo que le acompañó hasta el día de su muerte. El primero en caer asesinado fué su hermano, el heredero tras su encierro y posterior olvido, la flecha le atravesó el cráneo de lado a lado sin tiempo para responder, una muerte rápida, al fin y al cabo no era culpable de mucho. El siguiente fué su padre, con él si se esmeró más en hacerlo sufrir, como si de una diana humana se tratara fué clavandole flechas en sus puntos vitales hasta tenerlo lo suficientemente cerca, como para ser reconocida por sus ojos atormentados, casi en su ultimo aliento pareció comprenderlo todo, Shiva, fría como el hielo, lo degolló como a un animal. La venganza estaba cumplida, ahora sería libre para hacer lo que quisiera, o al menos fuera del país pues fué considerada culpable hasta el último momento de su muerte. Como caza-recompensas, fué ganándose la vida aniquilando cualquier misión, contrato o trato que firmaba, pronto se hizo un nombre en las tierras del Norte, su sadismo y locura la llevaba a matar inocentes en muchas ocasiones, lo que la condenó a sufrir una horrible condena en el Inframundo, de no ser por la intervención del Juez de Grifo, Falkon.**
**Shiva murió envenenada, y con ella se acabó su leyenda, cuando en medio de un encargo bebió agua envenenada en uno de los ríos que rodean su país El veneno fué lanzado por un sirviente de un conde al que no quiso ayudar en favor de su hermano, eran demasiadas variables que controlar, por lo que poco pudo hacer en el engaño. Una vez que abandonó el mundo de los mortales, accedió al Inframundo como toda alma condenada. En la cola de la primera prisión esperaba a su juicio totalmente resignada, hasta que apareció Falkon. Éste conocía su historia muy bien, pues le sorprendió la enorme facilidad con la que " la bruja", había conseguido fusionar su alma con la de una joven pura de nacimiento, fué esta parte la que le hizo acreedora al perdón. Por aquél entonces, el Juez tenía en mente la idea de un guardián de gran poder y habilidad, que custodiara su templo de cualquier intruso en su ausencia, o no. Shiva pronto conectó con el Kyoto y accedió gustosa al ofrecimiento, el Inframundo le pareció un lugar fascinante, seguramente por su afinidad con la muerte desde niña, por lo que rápidamente se adaptó a lo que sería su nuevo hogar, el Templo sagrado del Grifo, el Juez Falkon tenía por fin, la guardiana que deseaba.**
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Re: Ficha de Falkon de Grifo
FALKON EN EL LIMBO A LA ESPERA DE SER DESPERTADO
**Nada hacía presagiar que aquél día el Juez de Grifo abandonaría su puesto en el ejército del dios Hades, se las prometía muy felices cuando, junto a Lord Disturbed, marcharon a las lejanas tierras de Rozan en busca de la liberación de otro de los demonios primigenios del Inframundo, Lord Eddie. La pareja del averno no tuvo ninguna dificultad en llegar hasta el monasterio de la mentira, un lugar milenario donde sus monjes, fieros guerreros, protegían una urna con la esencia maligna y oscura. Lord Disturbed, en una demostración de fuerza colosal, envió un ataque que de no haber sido frenado por un anciano de nombre Liu Shin, hubiera transformado todo en simples cenizas. Pero la aparición del maestro no fue lo único inesperado.**
**El demonio primigenio, totalmente irritado, utilizó a la resistencia humana como conejillo de indias para sus nuevas criaturas, centenares de pequeños seres carnívoros dejaron el campo de batalla convertido en una autentica carnicería. Todo parecía acabado, pero apareció el santo más dotado de esta era, Dhoko de Libra, que con sus míticos dragones igualó la contienda. Falkon lo esperaba, sentía que el lugar del monasterio estaba demasiado cerca de la morada del caballero, era cuestión de tiempo su aparición. El Kyoto, queriendo demostrar su habilidad con el fuego, lanzó un fuerte ataque que fue contrarrestado por la pareja con gran habilidad. El Lord, viendo el panorama, decidió mostrar lo que era realmente dominar un elemento, con una piroexplosión de enormes dimensiones calcinó todo a su alrededor, momento que aprovechó el Kyoto para acercarse al lugar donde los monjes guardaban la urna con los restos de Lord Eddie.**
**Pero el lugar no estaba solo, Kokoe, y una especie de gato doméstico, era lo único que separaba al Juez de su objetivo. Falkon se dejó distraer, y la resistencia del lugar le propinó un fuerte golpe que le causó heridas serias. Cuando todo hacía parecer que el espectro se saldría con la suya, el gato mostró su verdadero rostro, se trataba de Nerd Tamid, un guardián poderoso de Aurora, la ciudad donde Falkon conoció al Padre Tierra. A la misma vez, en un alarde de valentía sin precedentes, Liu Shin se sacrificó para encadenar a un Lord Disturbed furioso, como prueba su potente ataque de Lluvia Azul.**
**Con el demonio encadenado, y Dhoko en la cuerda floja, éste fue a intentar que Falkon no liberara a Eddie, pues esa acción supondría el fin de todo. Con gran sacrificio y habilidad pudo esconder una de sus poderosas espadas en uno de sus ataques hiriendo de muerte a un sorprendido Kyoto de Grifo. Ner Tamid, que por aquél momento volaba lejos con Kokoe y la urna, se dió cuenta de que era necesario para frenar la liberación de las cadenas que aprisionaban a Lord Disturbed. Éste, en un nuevo ataque sorprendente, inutilizó al guardián hiriéndole en una de sus alas. Todo parecía acabado, pero contaban en su haber con un sello de Athena, el león, mostrando su sabiduría pudo sellar al demonio y mandarlo de vuelta al Inframundo, pues sus poderes no le daban para hacerlo desaparecer. Falkon, ya había abandonado la Tierra sin rumbo conocido.**
**El espectro de Grifo fue enviado al Limbo, el lugar donde las almas permanecen a la espera de ser enviadas, o bien a su juicio, o bien de regreso a su lugar. Hades no estaba por la labor de volver a contar con Falkon en esta era, así que lo dejó que vagara en busca de respuestas a su fracaso como Juez.**
- Pelea donde ocurre todo:
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