Buscando la Kamui de Poseidón

por **Presley** Mar Mayo 26 2015, 22:45

Código:: OFF: Utilice los nombres de los personajes actuales que existen y otros inventados

— Señor... lo hemos encontrado — dijo una voz a unos metros detrás de mí. Lentamente me voltee para encontrar a Sarada de Sirena parada ante mí. Era una chica de cabello oscuro y ojos negros, de piel blanca y cuerpo muy fino. Le sonreí, mientras con un ademan de mi mano hice que mi capa enarbolara tras de mí.
— Perfecto Sarada — dije con una gran sonrisa en mi rostro. Finalmente la oportunidad que tanto había estado esperando era por fin una realidad. Había logrado hacer lo que el dios Poseidón me nombrará su asesor de confianza para que llevará a cabo las tareas que el mismo en persona no pudiese llevar. Junte un ejército digno de su poder, pero lo logre antes de tiempo.
Como se sabe desde la era mitológica, Poseidón tiene a su mando 7 Generales Marinos, cuyo poder es equiparable al de los caballeros dorados. Además de eso, una sirena que se encontraba por encima del poder desplegado por los santos de plata del Santuario, y un ejército de soldados rasos... Todos ellos le sirven, obedecen y le son fieles. Pero no son los únicos guerreros a su mando como popularmente se cree... Hay mucho más que descubrir y por fin lo hemos encontrado.
— Llévame al lugar Sarada, y cuando ya esté allí, llama inmediatamente a los demás generales marinos, no quiero que las cosas se salgan de las manos — Le dije. La emoción estallaba en mí de saber que podía haber encontrado la verdadera Kamui de mi Dios y con ella finalmente comenzar la batalla contra el Inframundo, apoyados por el Santuario y sus guerreros.
Comenzábamos a caminar cuando un soldado raso nos alcanzó, se acercó y me dijo al oído. — Señor, Donovan no ha regresado aún, pero en cualquier momento regresara —. Donovan siempre estaba con Falkon, el recipiente del Dios de los mares en esta era y era por eso que difícilmente lo encontraba en los momentos importantes. Aún así, era mejor que no estuviera con lo que iba a pasar en unos instantes. — Perfecto, Retírate — le dije y desapareció.
Caminamos por largo rato, entrando en zonas que nunca antes había explorado en el fondo de los mares. Debemos entender que el 95% de la Superficie de la tierra es Agua, y de tal magnitud son los dominios de Poseidón. Por más que explorara, nunca terminaría, fue lo que pensé entonces.
Sarada iba guiándome por estos lugares, llevándome a este lugar tan importante para mis objetivos y los del mismo emperador de tan vasto imperio. Poseidón todavía no despierta a plenitud sus poderes, por lo que no sabemos si este objeto logrará despertarlos y con ello traer su Kamui… Solo nos quedará esperar a que así sea. Por eso esta oportunidad es tan importante para mí. Tendría la oportunidad de surgir a la tierra y acabar con todos mis enemigos, empezando por aquellos guerreros que son liderados por Hades.
Tritón, Hijo de Poseidón y sellado incluso antes de la última guerra Santa es la llave de todo… Con su poder podremos encontrar la vasija del alma pura de Poseidón, con la que mi señor Falkon podrá recuperar todo el poder devastador del Dios de los Mares y con ello la Kamui del emperador. Cuenta la leyenda que antes que estallara la guerra santa del siglo XVI, 3 caballeros dorados, junto a la diosa Athena sellaron su alma justo antes de que resurgiera junto a su ejército. Su Poder es semejante al de Poseidón, con la diferencia que tiene un ejército más numeroso, y por el cual Poseidón, que desconfía incluso de su propio hijo, decidió rodearse de sus 7 generales marinos, para comandar el ejército de Tritón.
— Estamos llegando al lugar General de Sirena — Dijo Sarada. — El lugar está muy cerca de aquí —. Terminó. Varios soldados se encontraban vigilando el lugar.
No pasaban si quiera 5 minutos cuando la divise, era la Isla Yonaguni, que se encontraba en el fondo del mar. Este era un lugar especialmente hecho para las batallas, era un gran lugar preparado por Poseidón y confiado a Tritón para cuando llegara el momento. — Aquí Señor, debemos entrar en esta cueva — me dijo Sarada.
Entramos en una cueva y caminamos alrededor de 2 minutos cuando llegamos a una puerta que desprendía un brillo especial. — Muy bien Sarada, ahora ve y reúne a todos los generales marinos presentes y tráelos a este lugar — le dije. La joven de cabello negro salió mientras yo me quede observando el lugar y explorándolo lentamente… Pose mi mano sobre los metales de la puerta, para apreciar de forma directa cuanta belleza y dedicación tenía. Era completamente de oro y emitía un brillo y un cosmos especial, como si la misma Athena hubiese fundido su sangre en los metales que la componían y así formar un sello irrompible que permitiera mantener encerrada el alma de Tritón por más de dos mil años. Era por eso que necesitaba la presencia de todos los generales marinos, inclusive hasta la del mismísimo Poseidón, pero en las condiciones actuales no me serviría de nada molestarlo. La puerta tenía un pequeño sello que contenía el alma de Tritón. No podía creerlo, llegaba el momento del resurgimiento del imperio marino a plenitud, y de su líder... Poseidón, quién podría recuperar su poder y enfrentar a Hades en una batalla sin precedentes, ambos utilizando la Kamui propia de ellos.
Me acerque a la puerta, y me dispuse a quitar el sello. Fuera como fuera, necesitaba la ayuda de mis compañeros y de mi Dios para liberar su alma, y por ahí quizás la ayuda de algunos otros guerreros poderosos. Tritón tendría que ser contenido por mi fuerza junto a la de los demás generales marinos. Tome el sello mientras sentía como la ansiedad y el nerviosismo estremecía mis entrañas.
Finalmente, Sarada de Sirena había regresado en compañía de todos los generales marinos de esta era, inclusive el mismo Poseidón había llegado al lugar a echar una mano con el sello. Todos pusimos las manos sobre la puerta dorada y encendimos el cosmos de nuestros corazones, para que el sello se debilitara y poder retirarlo con más facilidad, con lo que el alma de Tritón sería libre. Extendí mi mano derecha hasta el sello Y finalmente lo quite. Pude sentir como un poder enorme salía disparado hacía lo largo y ancho del océano, un poder que solo un Dios del calibre de Poseidón podía contener.
Un destello Poderoso me lanzo disparado una gran distancia. En un instante la puerta yacía abierta y varios destellos de luz salieron disparados atravesando el túnel y el lugar. Más adelante me enteraría que eran las armaduras de Tritón buscando sus legítimos portadores. El lugar se estremeció como nunca antes se había estremecido aquel fondo del mar. Los murallones que formaban aquel túnel comenzaron a desplomarse, se trataba de un terremoto subacuático el que se había producido con la intervención de nosotros en aquel lugar.
— Después de tanto tiempo... ¡¡Libre!! — dijo una voz grave que retumbaba en el lugar. La figura de Tritón se comenzó a materializar. — ¿Cuál es tu nombre? — Me pregunto el alma de Tritón al darse cuenta que me encontraba tirado cerca de él. — Soy Franz, el general marino de Sirena Alada, uno de los 7 Generales de tu padre, Poseidón — Conteste algo nervioso ante la mirada perpleja de mis compañeros que no atinaron a hacer ni decir nada. Inclusive el mismo Dios de los Mares se mantenía en el lugar con una cara de asombro. — ¿Uno de los generales marinos? — Preguntó sin esperar una respuesta, — ¿Donde esta Poseidón, mi padre? — Volvió a preguntar con seriedad. — Señor, Poseidón es aquel que tienes a tu lado, ¿No notas su cosmos divino que fluye por sus venas y que inunda este lugar para mezclarse con el cosmos que emana de su figura celestial? Puede que aún no haya despertado completamente pues hace poco que ha resurgido en esta era, pero le aseguro que ese hombre que porta la Escama marina del Dios de los Mares es el recipiente de Poseidón en esta era — le conteste nuevamente. En ese instante, una luz comenzó a resplandecer detrás de mí hasta el momento en que termino frente a mí como una estrella fugaz. Era el cuerpo de una persona que había sido raptada por su poder para ser utilizado por él. Nuevamente un gran destello ilumino nuevamente todo el lugar para mostrar al Dios Tritón con su armadura relampagueante.
— ¿Franz, dime que es lo que buscas junto con nuestro señor Poseidón? — Me volvió a preguntar. — Es necesaria su presencia en los templos de Poseidón, más concretamente en la sala de las escamas marinas, para que funda con su sangre la escama de su padre. Con ello podremos traer a la vida la verdadera fuerza y voluntad de nuestro Dios de los Mares y su Kamui, para así enfrentar a nuestro enemigo. Hades hace mucho tiempo que hace de las suyas en el mundo, por lo que debemos de detenerlo junto con los aliados del Santuario — Le conteste. Terminaba de hablar cuando los demás generales marinos comenzaban a ingresar a la cueva y a nuestra vista. — Con usted mi señor — dijeron y se arrodillaron frente a mí y a Tritón. Poseidón se paró a su lado y poso su mano sobre su hombro derecho, en señal de que estaba complacido por su presencia.
— Mi señor Tritón — dije inclinándome ante él, — Mientras Poseidón no se encuentre completamente despierto, nosotros, los generales marinos, estaremos a su servicio. Pronto será el tiempo en que reine junto a su padre, pero para ello deberá de apoyarnos en esta batalla que se avecina y hacer lo que le he dicho para que el verdadero de su padre sea liberado de una vez por todas —.
— Buen soldado — dijo con una sonrisa en su rostro, — Mañana los guerreros de los 7 mares junto a su líder y demás tritones, estarán aquí y... ¡¡¡¡AVANZAREMOS A LA BATALLA CONTRA HADES, MI PADRE ENCABEZARA NUESTRAS FUERZAS Y YO JUNTO CON ÉL!!!!-

por **hellkevin** Jue Mayo 28 2015, 12:45

excelente historia pres, los guerreros marinos se vuelven a reunir y esta vez con Triton y sus amigos a la vanguardia Razz

calificación: 5

premio: 5000 monedas

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