[TORNEO] Ichann Vs Milo73

por **Ichann** Lun Ene 28 2013, 14:48

Milo73

Vs

[TORNEO] Ichann Vs Milo73 Rol1ssycy

Ichann

por **Ichann** Mar Ene 29 2013, 15:03

**La noche caía en la Colina de la Dignidad y es el Santo escarlata descansaba en sus aposentos. La oscuridad había tomado por completo el lugar y aunque se prestaba para consumir el merecido descanso el guerrero de la corona no podía cerrar los ojos, al parecer algo lo perturbaba desde hace varias noches, ya hacía varios años que ichann estaba bajo protección de su Dios Febo Abel y aunque él se sintiera a gusto en dicho lugar había algo que lo molestaba, al parecer la paz y la tranquilidad de dicho lugar hacían que ichann desconfiara mas de todo tanto así que se podía notar como toda su alma se volvía oscura como la noche.

La vida para el guerrero escarlata seguía pero al parecer lo que no se percataba era de que su corazón se volvía mas y mas inestable y eso se podía percatar cada vez que ichann volvía de una misión, su rostro era cada vez mas distinto y demoniaco, el aura que desprendía era vil y fría y por ultimo de gentil y considerado paso a malhumorado y odioso. Al parecer ese ya no era lugar para el santo escarlata o algo lo llevo a pasarse al lado oscuro. Tanto era mal que acechaba al guerrero que este había escuchado un rumor de que el rey de las tinieblas, Tan bien conocido como Hades, había vuelta a la tierra para contaminarla con su maldad, ichann a escuchar esto no solo se le dibujo una sonrisa en su cara que no se la veía hace mucho sino también que se estremeció al saber que dicho dios estaba tan cerca de él para aprender como canalizar ese odio o mejor como usar ese odio para volverse más fuerte, sabía que sería una misión suicidad y que antes de alcanzar a hades tendría muchísimos obstáculos pero al parecer era algo que debía hacer sea como sea...**

por **Milo** Mar Ene 29 2013, 16:29

TURNO DE INTRODUCCIÓN

**Los invitados entraban por un pasillo cubierto de enredaderas. Navegaban con bandera de gala. Las ninfas no escondían los escotes. Sombreros de copa y bastones salieron de los guardarropas para lo que sería una noche inolvidable.

El pasillo estaba alumbrado por pequeñas antorchas que, a sus pies, eran adornadas por exóticos arreglos florales. El pasillo atravesaba todo el templo. El fuego embellecía los corredores. Al final, un jardín. Un majestuoso espacio al fondo del templo. Espadas y armaduras lo adornaban. Elegantes mesas y hermosos manteles vestían la velada. Tres veladoras en cada una de las mesas, de distintos tamaños y formas, todas ellas de un exquisito aroma.

Un ensamble musical y vino acompañaron la cena. La champaña hacía un rapidísimo recorrido de la caja a la mesa a la copa al paladar, luego la botella vacía, en una caja al rincón del jardín.

El anfitrión estaba sentado en una mesa, muy pequeña, sin compañía, sólo disfrutaba viendo a sus invitados. Algunas veces hacía una señal a un esclavo con la mano, éste llegaba corriendo y obedecía cualquier tipo de orden. Los músicos iniciaron el maratón de valses.

Las parejas se levantaban a bailar, a flotar al compás de la música, el anfitrión creía que lo observado era hermoso, aquel espectáculo lo hacía sentir, que él también bailaba por dentro. Era la hora indicada de tomarse un par de copas. Hizo una seña al esclavo, éste llegó corriendo. Se acercó al oído del elegante caballero. Recibió la instrucción y no tardó mucho en llegar con una botella de vino, la descorchó y le sirvió una copa. El hombre que hizo la fiesta para halagar a sus amistades llevaba por cargo el de Dios del Infamundo, sí, Hades había despertado. Poco a poco bebió su vino, hasta que no quedaba más en la botella.

La luz de las velas emitían una iluminación cada vez más débil. Hades ordenó al esclavo que en cada esquina del jardín ardiera una antorcha. El esclavo cumplió rápidamente la orden del Señor. El ambiente se iluminó por completo. Al señor del Inframundo le agradaba cuando susdecisiones resultaban acertadas.

Las horas pasaron. Las cajas de champaña se fueron amontonando al fondo del jardín. El anfitrión decidió bajar de su lugar. Al hacerlo, varias ninfas lo invitaron a bailar, sin embargo, esa era una actividad que se permitía pocas veces y esta no era una ocasión propicia (aún).

Era la hora indicada para sacar la sorpresa que le tenía a sus invitados. Le hizo una seña al esclavo, pero no era una seña como las anteriores, era una seña peculiar. El Dios del Inframundo tomó el sombrero de copa con la mano izquierda, lo levanto e hizo un giro con él en el aire, después lo aterrizó en su bastón. El esclavo al darse cuenta corrió a toda velocidad por todo el pasillo de antorchas. Entró a la casa, pasó las dos primeras salas de estar, abrió una puerta que lo llevó hasta la cava, ahí, a un lado de los vinos se hallaba una caja de gran tamaño. Con mucho esfuerzo se la acomodó en los hombros y regresó al jardín.

El mozo dejó la caja ante los pies de Hades, el Dios tomó la caja y la abrió. En su interior había una gran cantidad de máscaras, algunas muy bellas, otras extrañas. Algunas más grandes que otras.

Caminó y fue repartiendo las máscaras al azar, en poco menos de quince minutos toda la fiesta estaba enmascarada. El esclavo se acercó a los hombres que estaban a cargo del sonido, les pidió que dijeran por el micrófono que todo el mundo debía llevar puesto su abrigo, por estorboso que fuera. Así sucedió.

La música ya no era de vals, ahora era una música mucho más fuerte, mucho más pasional, la gente empezó a bailar con todo el mundo, al terminar cada canción las parejas buscaban un nuevo rostro oculto.

El señor Hades regresó a su posición. El esclavo le llevó otra botella de vino. Las canciones iban y venían, las parejas cambiaron incontables veces. La botella de vino quedó completamente vacía.

Las personas empezaron a despedirse, poco a poco. Las parejas fueron abandonando el lugar, sin embargo, cada que una pareja salía del jardín, ocurría algo extraño: por cada invitado que abandonaba de la fiesta entraba al jardín una sombra. Entre los músicos hubo gran desconcierto.

Los esclavos no sabían de que manera podrían atender a la nueva concurrencia. El esclavo se plantó en medio del jardín y levantó sus hombros como pidiendo una indicación al anfitrión. El señor Hades se incorporó, desde su lugar pidió silencio a los músicos, levantó su sombrero de copa, hizo una reverencia.

- ¡Bienvenidos sean todos, esta fiesta recién comienza. Ha llegado el momento!**

por **Ichann** Jue Ene 31 2013, 17:08

**La partida de la colina de la dignidad no iba a hacer demasiado fácil, era una cosa que ichann debía hacer sin ser detectado, tendría que desobedecer a dios y así poder buscar al dios de las tinieblas pero por dónde empezar, ¿Que hacer? a ¿Donde preguntar? Eran muchas de las preguntas que se hacia ichann en la cabeza pero su decisión ya estaba tomada y solo tenía que esperar nuevamente la oscuridad del día.

El anochecer nuevamente cayó sobre el lugar e ichann tenía todo listo para su partida, aunque muy en el fondo el sabía que su dios Abel sabia de sus intenciones eso no lo detendría para seguir su destino que era encontrar al dios del inframundo. Al llegar a la salida del lugar una sombra se veía a lo lejos, al parecer una persona sabia de la huida de ichann lo estaba esperando para poder hablar con el**

Yahiko: -Ichann, que estás haciendo, adonde te diriges ni siquiera has hablado con Abel de tu partido y te vas a si porque sí, que te ha pasado amigo mío has cambiado muchísimo...-

[TORNEO] Ichann Vs Milo73 Rol11sypy

Ichann: -Yahiko esto no es de tu incumbencia, retírate de enfrente o si no te arrepentirás muchísimo te lo juro...-

Yahiko: -No puedo dejar que te vayas y menos en ese estado de ira incontrolable que has obtenido, tu no eras así que paso con la persona humilde, sencilla y bondadoso, que paso con mi amigo, mi hermano.. Despierta de una vez o sino...-

[TORNEO] Ichann Vs Milo73 Rol10saga

Ichann: - O sino que me detendrás, no me hagas reír basura ahora esta es mi última advertencia... Muévete o mueres...!!!!-

Yahiko: -No voy a moverme, si quieres matarme hazlo pero te lo juro por mi vida que no darás un paso más-

**En ese momento ichann no dudo y lanzo su corona de fuego sobre el joven yahiko dejándolo tirado en el piso completamente inmóvil y al parecer había acabo con la vida del pequeño joven, ya no había obstáculos ni vuelta atrás ahora lo único que faltaba era encontrar pistas para saber en donde se encontraba el Dios Hades y lo único que se le ocurría al santo de la corona era buscar a algún espectro para interrogarlo y así cumplir con su cometido.

Ichann dejaba todo atrás y en la entrada un malherido yahiko se levanta y no deja de pensar en su amigo y del por qué no termino con su vida, al parecer todavía quedaba algo de ese ichann que el pequeño joven conocía y al parecer volvería a la normalidad al sacarse todas sus dudas o miedos...**

por **Milo** Jue Ene 31 2013, 17:31

**Las sombras fueron tratadas de igual manera que los anteriores invitados, el esclavo tuvo que correr a la cava a traer más vino, coñac y champaña. Los demás esclavos recibieron la orden de ofrecer canapés y postre a las sombras. Pero ninguna de ellas quiso comer. El Señor Hades tomó la caja de máscaras en sus manos, bajó y las repartió nuevamente. Las sombras se pudieron distinguir, tan sólo un poco.

Las sombras bailaban, sus movimientos llevaban el color de la armonía. Parecía que algún maestro de títeres se encontraba realizando un gran acto circense. Las sombras se suspendían al ritmo de la música, que sufrió un cambió extraño, pues, a decir verdad, los músicos estaban verdaderamente aterrorizados. La música que salía de sus instrumentos sólo podía ser macabra, no era que ellos quisieran tocar esa clase de música, sin nombre ni género. Un impulso recorría la columna vertebral de cada uno de los músicos, y de la nada, una extraña melodía acompañaba el baile de las sombras.

El Señor del Inframundo nunca había estado tan feliz y satisfecho con una de sus fiestas. Las sombras continuaron bailando sin descanso. Hades se había bebido otras dos botellas más de vino tinto.

Las sombras comenzaron a abandonar el lugar, poco a poco la pista de baile se fue quedando sola. Sólo faltaban cinco sombras por irse, había dos parejas en la pista y una Sombra estaba en la esquina del jardín, justamente en la reja que daba hacia el Río Aqueronte. El señor Hades llevaba mucho rato observándola, cuidando cada uno de sus movimientos, siguiendo cada uno de los pasos que daba. El perfil de la Sombra era hermoso, esbelto, delicado, sensual, casi perfecto. El señor del Inframundo sintió una terrible ansia de acompañar a aquella figura.

El Dios del Inframundo le indicó al esclavo que trajera la mejor botella de la cava, el esclavo asintió y en menos de dos minutos, el anfitrión la tenía empuñada. Bajó de su lugar, caminó, lentamente hasta la sombra, y cuando estaba a punto de llegar ella volteó. Caminó hasta el señor Hades con una copa vacía y la puso a tres centímetros de su mano. El señor Hades sirvió, a Sombra bebió.

Pasaron un buen rato charlando, si a aquello se le podría llamar charla. El señor Hades hacía preguntas y la Sombra contestaba moviendo el dedo de forma afirmativa o negativa.

El señor Hades decidió invitar a la Sombra al interior del templo. Estuvieron sentados un rato en la sala, al principio cada uno en un lado del sillón. Al terminarse la botella, se encendió la pasión. Ella abrazó al señor Hades, lo besó, apasionadamente.

Para el señor Hades lo que sucedía era extraordinario. Correspondía a cada uno de los besos, contestaba con abrazos y caricias. Arremetía con susurros y suspiros. La Sombra tomó de la mano al Dios del Inframundo y dejó guiarse hasta la abertura de una ventana.

- ¿Puede verlo señor? La libertad del mundo terrenal depende de usted. He sido enviada para ayudarlo, juntos podremos lograrlo.**

por **Ichann** Dom Feb 03 2013, 01:08

**La búsqueda del joven ichann parecía interminable, aunque este fuera su objetivo no pretendía que un espectro se le apareciera así por que si, lo que tenía que encontrar eran pistas o interrogar a personas para saber si estaba en el lugar correcto o solo estaba perdiendo el tiempo.

Aunque el santo de la corona se moviera a la velocidad de la luz recién habían pasado dos horas de la salida de la colina de la dignidad y aun no había encontrado nada de lo que estaba buscando, hasta que en un pueblo a las afueras del santuario y ya con las esperanzas nulas escucho una voz que al parecer sabia del paradero de lo que estaba buscando. La voz que se escuchaba era muy angelical y aparentemente pertenecia a una dama lo cual había dejado perplejo a ichann mas que nada porque al escuchar esa dulce voz lo hacía estremecer de una manera indescriptible...**

Voz: -No me preguntes cómo pero sé que estas buscando al señor Hades y yo sé dónde encontrarlo, en estos momentos el está dando una fiesta a las afueras de Grecia en su palacio recién creado, si tu valentía es extrema te diré las coordenadas pero solo si de verdad te vas a enfrentar cuerpo a cuerpo con el dios del inframundo sino creo que sería en vano que te diga su ubicación, que vas a contestarme guerrero???-

Ichann: -[ Como es que sabe mis intenciones, es de no creer y encima no das la cara, aunque parezca una mujer puede ser una simple trampa pero que mas me queda, he estado buscando el escondite de Hades por horas y nada y al parecer esta persona tiene la ubicación exacta, no puedo perder esta oportunidad, tengo que seguirle la corriente y ver hasta donde lleva todo esto...] Aunque piense que no mostrarse íntegramente es de cobarde debo confesarte que si quiero enfrentarme cuerpo a cuerpo con el Dios del Inframundo pero para eso necesito saber de su ubicación, tu puedes decirme con exactitud en donde se encuentra???-

Voz: -Como de saber donde se encuentra, lo sé, pero puedo decirte lo que quieras sabiendo que vas a obedecerme en lo que te diga sino algún juez del inframundo sabrá de tu paradero y no dudo que luchara a muerte contigo guerrero de la corona, ahora bien harás lo que yo te diga???-

**Ichann dudo por un segundo de las palabras que escuchaba a lo lejos pero también pensaba que no tenía otra pista para seguir y al parecer estaba atado por las condiciones de esta persona y no le quedaba mas remedio que seguir sus ordenes**

Ichann: -Se en donde te encuentras y puedo acabar contigo en un segundo pero también necesito saber del paradero de Hades así que no tengo más remedio que preguntarte que tienes en mente???-

Voz: -Muy bien eso es lo que quiero escuchar **En ese momento una máscara cae en los pies de ichann...** Por empezar quiero que te coloques esa mascara y tienes que seguir 5 km en dirección al noroeste y te encontraras con un gran castillo, al tener la máscara puesta ningún soldado o sirviente de Hades no dudara en dejarte entrar y así lograras tu primer cometido y después estarás solo Guerrero escarlata...-

**Sin mas presentaciones la voz femenina desapareció en el horizonte al parecer a ichann no le queda más remedio que seguir las instrucciones de dicha voz...**

por **Milo** Dom Feb 03 2013, 14:42

**Entraron a un dormitorio, Hades prendió unas velas, de esta manera su compañera no se disolvería. Se dirigieron directamente hacia la cama, la Sombra abrazó al anfitrión, ambos cayeron, él encima de ella. Se besaron, abrazaron, desearon, amaron. La ropa del señor del Inframundo voló, la Sombra sujeto su largo cabello oscuro. Las manos de Hades pasaron varias veces sintiendo el suave cuerpo de la Sombra. Las yemas de los dedos sintieron la delicada textura de la cara de su compañera, los dedos del anfitrión recorrieron su nariz respingada, su comisura partida, su hermoso mentón.

La amante del señor Hsdes le besó todo el cuello, la espalda, las piernas y los labios. Se acostaron, la Sombra le hizo el amor como ninguna mujer se lo había hecho, a ratos era tierna, a ratos explosiva, en momentos su cuerpo se convertía en fuego puro. Era lógico (el señor Hades nunca había hecho el amor con una sombra).

La Sombra comenzó a sudar, con ello su cuerpo cobraba una agilidad increíble, una flexibilidad asombrosa. La amante del anfitrión lo montó, subía y bajaba con gran velocidad, con fuerza y pasión. Lentamente el sudor comenzó a salpicar el cuerpo del señor del Inframundo, quien poco a poco comenzaba a sofocarse. Aquello era algo increíble para Hades pues había, en su ser, una combinación de asombro, de lujuria, pero también de ahogo y asfixia.

La Sombra resultó insaciable, el Dios no cedía ante la pasión de la amante. Hades trataba de imaginar el rostro de su amante, trataba de adivinar el color de sus gestos. La Sombra había tenido, ya, varios orgasmos. La humedad de su cuerpo, los gemidos, las uñas enterradas en la espalda del señor Hades, las pupilas dilatadas (no vistas) le decían al amante que su camino había sido exitoso.

La mujer se dejó amar lo suficiente por algunos minutos, ahora era su turno: montó de nuevo al señor Hades, le hacía el amor de una manera inexplicable. El Dios del Inframundo comenzó a sentir que el aire le faltaba, cada penetración lo asfixiaba. La sombra mandaba, no concedía tregua alguna. Hades comenzó a palidecer. Sus fuerzas se empezaron a agotar. El aire en sus pulmones era cada vez más pobre. Contra todos esos sentimientos, había uno mayor: el deseo. Hades luchaba contra el ahogo.

La mañana comenzó a asomarse por la ventana, los pocos rayos del sol invadieron el cuarto del señor Hades, pero aún hubo tiempo para un último orgasmo de la Sombra, quien con la luz que penetraba las persianas desaparecía, dejando tendido, completamente asfixiado al señor Hades.

Completamente sin aire y sin chance alguna de poder emitir sonido alguno, el Dios del Inframundo quedó en un estado moribundo. Nadie supo de este inconveniente, hasta que alguien abrió la puerta...**

por **Ichann** Mar Feb 05 2013, 16:32

**Sin más que hacer ni decir, el santo escarlata no dudo ni un segundo y tomo la máscara lanzara por aquella voz, aunque no había visto la cara de ayudante no tenía nada que perder por que al seguir así como estaba no iba a llegar a ningún sitio y al parecer lo único que le quedaba era confiar en una persona que ni siquiera se sabe si es de confiar.

Al parecer todo lo que había dicho aquella voz era cierto... Los kilómetros se iban terminado y a lo lejos se podía apreciar un castillo, al estar más cerca de dicho lugar se podía ver como espectros vistiendo sus sapuris protegían el entorno de dicho castillo pero al ver que ichann poseía la máscara lo saludaban con bastante gentileza y respeto como que de no hacerlo su vida al servicio de Hades pendería de un hilo, al llegar a la puerta principal unos extraños pero simpáticos gnomos esperaban a ichann con ansias y en un abrir y cerrar de ojos le abrieron la puerta de la entrada principal para que así pudiese entrar algo que parecía una fiesta. Muchas personas en el establecimiento diviertondose, bebiendo a más no poder y bailando como nunca y a lo lejos se podía observar como una persona observaba todo desde su enorme sillón, al parecer no podía ser otra persona que el Dios del inframundo, eso se podía descifrar muy fácilmente por el terrible cosmos que se sentía y aparte por toda la servidumbre de gnomos que se le tiraban encima.

La velada parecía interminable he ichann estaba que ardía, la sonrisa debajo de su máscara era indescriptible y las ganas de atacar a diestra y siniestra al Dios enfrente de sus ojos ir algo que no podía contener, pero cuando pensó en dar un paso todas las personas que se encontraban en lugar se retiraron y empezaron a llegar cientos de sombras al salón principal donde se encontraba el joven escarlata, al parecer el también se había convertido en una sombra y no para de pensar por que hasta que sintió el cosmos de cada sombra que se encontraba en el establecimiento, no cavia duda que se trataban de espectros de hades cada cosmos emanaba una energía maligna inconfundible y al parecer la cosmoenergia del joven ichann no era la de menos. Todas las sombras empezaron a danzar y hasta inclusive el joven guerrero fue cautivado por lo que al parecer era una damisela y también se puso a danzar hasta que pasado el tiempo casi todas las sombras se habían retirado del salón principal quedando solamente 4 sombras bailando y una sombra sin pareja que al parecer había cautivado al Señor Hades, a todo esto y después de un tiempo el Dios del Inframundo y esa extraña sombra habían desparecido de la vista del santo escarlata dejándolo así nuevamente con las manos vacías.

El amanecer estaba a punto de caer en el castillo y no había rastro de Hades por ningún lado, el baile ya había terminado he ichann estaba sentado, exhausto por la danza, y tratando de poder ubicar a su presa, hasta que a lo lejos se escucho un gemido, el guerrero ya sin esperanzas se levanto con su poco aliento que le quedaba y se dirigió hacia donde había escucho tal ruido, al abrir la puerta se encontró con un hades devastado y casi moribundo... Era de no creer su presa estaba ahí pero el guerrero estaba tan exhausto que ya no le quedaban fuerzas hasta que los rayos del sol cubrieron por completo su cuerpo y volvió a recuperar las fuerzas perdidas y la máscara que cubría su cuerpo desapareció por completo, ahora era la oportunidad, era una chance que no se podía perder...**

Ichann: -Dios del inframundo, mi nombre es ichann y vengo por su titulo... Usted es proclamado el rey de las tinieblas y no hay ser en la tierra que pueda con mi maldad y ahora se lo demostrare....-

Turno de ataque:

[TORNEO] Ichann Vs Milo73 Rolcarina16dark

**Ichann lanza su magnífica Corona de Fuego pero al parecer está ya no tenía el mismo color del sol sino mas bien parecía una bola demoniaca de color negro indescriptible y al parecer emitida cantidades de ondas negativas que al parecer hasta el mismo dios del inframundo estaba sorprendido**

por **Milo** Mar Feb 05 2013, 23:30

Parámetro:

()= Personaje secundario.

**[Así que de eso se trataba...]

- Ven, te daré las respuestas.

(Era ya la segunda repetición de su apocada afirmación. De entre su abultada cabellera volvió a sobresalir aquel gesto endurecido, cuyo efecto en mi persona variaba entre el asombro y la impotencia. Sus ojos, de un celeste intenso, demandaban una interacción desigual en la que mi alma dragada sucumbía, aquiescente. Imposible aventurar la vista hacia otro sitio. El campo magnético abastecido por el influjo de aquellos cráteres diminutos obraba en mí hasta someterme a un estado de absoluta rigidez.

Hades estaba sentado en uno de los peldaños que conducían a la entrada principal del templo y sujetaba un legajo encuadernado entre sus brazos. El tartamudeo que tenía, y las leves oscilaciones pendulares que regían el comportamiento de mi cuerpo cada vez que intentaba acercármele, desalentaban mis pretensiones de entablar cualquier conversación con él.

Su reticente cantinela escindía, con renovado ímpetu, mi curiosidad, y el fulgor que despedían sus retinas cauterizaba el impulso de mis pasos. Era su conducta una reacción que obedecía al odio.

Durante las visitas que hacía su templo percibí que, en reiteradas ocasiones, Hades acostumbraba ocultarse, dedicando la mayor parte de su tiempo a observarme, a estudiar mis rasgos y actitudes. Mientras un compañero y yo charlábamos plácidamente en una de las Prisiones, el timbre de una risa contenida atravesaba las paredes.

En un principio, esto ocurría solamente cuando me encontraba en compañía de alguien, sin embargo, aquel incansable escrutinio, comenzó a repercutir en mis actividades ordinarias a tal grado que, aún estando lejos del templo de Hades, la sensación de ser minuciosamente espiado afectaba mi serenidad.

Una noche, ya avanzada la madrugada, mi compañero, indefenso ante mis razonables cuestionamientos al respecto, me contó la verdad a la luz de una vela agonizante, cuya trepidación sacaba de la sombra ciertos detalles de los muebles circundantes a la mesa en que nos habíamos apostado para dar inicio a la lectura de una misma novela. Mi compañero, despojado por mi terquedad de sus evasivas e intentos por librarse de ahondar en el tema, finalmente confesó en un hilo de voz. Sus inmensurables ojos se habían cerrado.

- Lo he sabido siempre. Me ha dicho que te sigue... Él me lo ha dicho, nuestro Señor... No debes preocuparte.

Justo en ese momento volví a oír la furtiva carcajada. Se me heló la piel.

Tardé mucho tiempo en asimilar aquello. Empero, y pese a la angustia que había despertado en mí tan intrincada revelación, seguí viéndome con mi compañero. Descubríamos, con paulatino deleite, que nuestras afinidades crecían en número y que una misma percepción de las cosas parecía haberse fragmentado igualitariamente en dos espíritus que al fin se compenetraban.

- Ven, te daré las respuestas.

Estaba frente a mí. Lo veía por primera vez. Tal enfrentamiento enmarcábase dentro de los cuadrantes de la paradoja, si se toma en cuenta que nuestras coincidencias sumaban la totalidad de los instantes desde hacía algún tiempo. Aunque pareciera que nos observábamos indiferentemente, lo que en realidad sucedía era que él, haciendo uso del misticismo que irradiaba su mirada, era capaz de anular mis percepciones, mientras yo, abandonado a su inexplicable dominio, lograba, sin premeditación, hilar la misma pregunta en un tercer intento por distender el entramado de conjeturas que me aprisionaba.

Fue en este punto cuando cierta dulzura alteró la personalidad de Hades. Su actitud desafiante se trastocó en un aire de docilidad adoptado con malicia, con lo que el yugo a que me había supeditado se quebrantaba de una vez. Aún así, dueño de mí, continué paralizado frente a él, indeciso y, sobre todo, escéptico. La tranquilidad demoró en estabilizar mis nervios. Una vez que pude sobreponerme, calibré las circunstancias.

Descubrí entonces que el cambio repentino en la actitud de Hades se debía a que, una sombra, se encontraba detrás de mí. Su presencia parecía imponer una restricción al desenvolvimiento con que hasta entonces se había conducido Hades.

- ¿Es él señor?- El tono con que espetó la pregunta, ignoro por qué motivo, restituyó mi envaramiento.

- ¿Por qué se asusta, es que él no lo sabe todavía?

Instantes después de externar su misteriosa pregunta, Hades decidió mostrarme aquello que tan recelosamente preservaba y que no pasó de ser un álbum de fotografías con las pastas capeadas de polvo. Reavivando su semblante, nos lo restregó a la sombra y a mí. Una risa desparpajada, nerviosa, le deformaba los labios.

El tópico de la única imagen adherida a la página, que Hades, seguramente, apartaba con su índice desde hacía largo rato, era un sepelio. Varias personas de luto circundaban una recién perforada huesa.

Pude reconocer a Hades entre la variedad de rostros desencajados por el llanto. Sus delicadas facciones de alabastro hendían la solapa negra sobre la que se guarecía del sufrimiento, auxiliada por los brazos de un hombre de torso grueso que, por estar agachado, me impidió conocer su identidad. Cuatro hombres de gafas oscuras colocaban cuerdas a un féretro para facilitar su descenso hacia la fosa. Me quedé, como al principio, inmovilizado por el estupor...

El álbum, que se había abierto al impactarse contra el suelo cuando Hades me lo lanzó, exhibió de esa forma una segunda fotografía. Era el retrato de la persona que yacía dentro del féretro. Dicha persona era yo.

Vi mi rostro delgado a través del cristal de la caja, que había permanecido expuesta durante la velación, y sintiéndome arrastrado fuera de los lindes de la lucidez, movido por una curiosidad que ya no buscaba saciar su incógnita, sino rectificar la perdición a la que se abismaba irrefrenablemente, levanté la vista. Intuyo que, en ese momento, mi semblante se asemejó al de Hades.

La sombra comenzó a caminar con cierta gracia núbil, apoyándose en un barandal con una mano y sosteniendo la punta de su vestido negro con la otra. Su gesto denotaba una profunda consternación. Al estar cerca de mí, dirigía su vista al álbum, luego me embestía con su proterva mirada, volvía al álbum y así alternativamente hasta que la distancia entre ambos se redujo a centímetros.

Fue acercándoseme con lentitud. Recargó sus muñecas sobre mis hombros. Cerré los ojos y sentí el roce gélido de sus labios en mi boca.

Entonces vi que Hades, sin quitar la mirada hacia mí, dijo dos palabras. Fue en ese momento que mi alma se fue del cuerpo, y la sombra, tomó posesión de él.

Posteriormente, la imagen de mi cuerpo desapareció para transformarse en el mismo Dios del Inframundo. La semejanza era idéntica.

A partir de allí, observé todo lo que sucedía. ¿Desde dónde? desde el féretro del libro.)**

por **Ichann** Jue Feb 07 2013, 23:29

Ichann: -[Si fuera tan fácil derrotar al dios del inframundo yo mismo tendría que proclamarme como nuevo dios, esta persona sufrió la ira de mi corona de fuego que al parecer cambio rotundamente, se podría decir que soy medio guerrero de la corona y medio demonio. Jajajaj, esto se está poniendo divertido], SI SUPUESTAMENTE ERES EL GRAN DIOS DEL INFRAMUNDO PENSASTE QUE CON UN SIMPLE TRUCO BARATO IBAS A PODER ENGAÑARME, NO SABES A LO QUE TE VAS A ENFRENTAR "SUPUESTO DIOS". SE QUE ME ESTAS ESCUCHANDO Y NO DESCANSARE HASTA VER TU VERDADERO CUERPO ARDER ANTE MI BLACK CORONA DE FUEGO, SI ESCUCHASTE BIEN, TE MATARE Y LUEGO ME PROCLAMARE COMO EL NUEVO DIOS DEL INFRAMUNDO JAJAJAJAJAJAJ-

**Ichann sabía desde un principio que la persona que había organizado la fiesta y se hacía ver como Hades no era más que un simple impostor, aunque el Dios había echo parecer a esa persona como un clon de sí mismo para el guerrero coroniense no eran más que trucos baratos y en lo único que pensaba era que para que el Dios del Inframundo se tomara tal molestia para no encontrarse con dicho guerrero tenía miedo de combatir cuerpo a cuerpo con él.

Al seguir buscando alguna pista del paradero del Dios y al no encontrar nada que especifique su paradero, él mismo se tomo el atrevimiento de implementar una búsqueda de su enemigo y así cumplir con su cometido el cual ya no era saber de donde provenía su maldad sino mas bien destronarlo por completo y proclamarse como nuevo Dios del Inframundo. Ya sin la máscara, porque no tenía que ocultar mas su presencia en el establecimiento, el guerrero de la corona se digno a inspeccionar todo el lugar sabiendo que podría encontrarse con palos en la rueda, algún siervo de hades comúnmente llamado espectro. Al llegar a lo que parecía el segundo piso de dicho palacio se sentía a lo lejos una cosmoenergia maligna que al parecer pertenecía a algún guerrero de hades, al acercarse mas y mas se pudo escuchar como ese espectro se percato de la presencia de ichann y se hizo escuchar así mismo...**

Espectro 1: -Quiiien anda ahí, eeeesto no es lugar para que nadie este merodeando, o eres tu otra vez haciendo un jueguito, sabes que aunque seamos compañeros esas cosas no me gustan, que sea nuevo no significa que juegues así... Me estas escuchando???-

Ichann: -Fuerte y claro guerrero mediocre...-

**El espectro no podía entender como alguien podía haber llegado tan lejos en el palacio de hades, el no sabía si correr, ponerse en guardia y atacar o simplemente huir despavorido del lugar. Era más que obvio que su inexperiencia como espectro lo hacía más vulnerable para el guerrero de la corona, al verse cara a cara este quedo inmóvil con el solo y simple hecho de sentir una mínima cosmoenergia que emanaba de ese guerrero, no le salía ninguna palabra sino que podía sentir como el enemigo se había dado cuenta de que el enemigo era casi tan poderoso como su Señor.

Apenas termino de parpadear el espectro la pelea ya había terminado, dejando como conclusión al sirviente de hades a disposición de ichann, quien decidió someterlo a un interrogatorio para así sacarle información del paradero de su Dios. El Santo de la Corona bombardeo de preguntas al asustadizo espectro que él lo único que repetía era lo siguiente: -No tire diiiiire naaada- Al ver que la decisión del guerrero era tal, lo único que le dijo antes de terminar con su vida fue: -Pronto vas a decirme todo lo que quiera porque estás viendo a tu próximo dios basura, adiós-Tan pronto como termino de decir esas palabras ichann acabo por completo con ese sirviente con su nueva técnica llamada Black Corona de Fuego y al parecer solo le quedaba seguir buscando por el sabia que en alguna parte de ese enorme castillo se encontraba su presa más deseada...**

por **Milo** Vie Feb 08 2013, 01:17

Parámetro:

()= Personaje secundario.

**[Increíble, pero por algo deberá ser...]

(Hoy ceso de existir. Esta enfermedad que me aqueja desde hace años finalmente dejará de atormentarme. Muchas veces pensé en este momento. En el último ataque, en la fiebre que desaparece y en la furia que se extingue, pero jamás pensé que sería así.

Los especialistas han expresado certeras predicciones sobre esta noche. Afirman sin duda que no habrá otra. Jamás. La maravilla termina y la oscuridad reinará por siempre.

Con una ligera ansiedad que no pensé sentir, espero el momento en que la brillante luz bañe mi cuerpo y se apodere de mi conciencia. Imagino a la muerte danzando en el cosmos, impasible, segando de un tajo la ilusión. Marchitando la esperanza de un seco golpe.

Aguardo con impaciencia a que el sol se oculte. Deseo verla por última vez. Ansío sentir sobre mi piel la amorosa caricia de Kishima, mientras me extasío con el ligero viento que eriza mis vellos. Ya la extraño y aún no se ha ido. Mis lágrimas corren ya por su ausencia.

No habrá ya cantos nocturnos ni cenas románticas. La complicidad con esa amiga incondicional terminará al fin. El amor sufrirá, pero sé que podrá sobrevivir por siempre, como la vida misma. Aún con una pérdida que jamás podrá ser olvidada; aún cuando no haya quien la extrañe.

Es increíble como uno empieza a añorar algo que aún está presente, pero que sabemos pronto nos dejará para nunca volver. La noche será eterna. A partir de hoy. No hay salvación alguna. Es el fin. Las cifras son duras y frías. Impasibles. Los estudios no dejan lugar a dudas. Esta será la última noche que entregaré mis suspiros y mi aliento a la luna llena. No habrá más.

A medida que la oscuridad me envuelve, instantes previos a la iluminación final, aprecio el mágico don que recibí y que transformó mi vida para siempre. No puedo creer que esté agradecido con Dios o con la naturaleza, pero el dolor ha sido mucho, el propio y el ajeno y hoy termina todo. El mañana ya no será igual, simple y sencillamente, porque no habrá uno.

Al dibujarse apenas la brillante silueta en el horizonte, la paz interior se convierte en ansiedad. No puedo aceptarlo pero es cierto. Los brujos de todo el mundo han confirmado la triste e increíble noticia. La luna llena que hoy se alza majestuosa, iluminando la noche, las almas y los corazones, será la última que veremos todos. Un cometa gigantesco chocará con ella en cuestión de horas y la destruirá por completo. En su agonía cargará con la raza humana y millares de años de civilización.

En esta noche del adiós a la humanidad, agotaré mi energía sin remordimientos, precipitando graciosamente el fin de cuanto hombre, mujer o niño encuentre a mi paso. Los ayudaré a llegar pronto a un final que de cualquier manera llegará. Después, beberé su sangre, en un postrero brindis, en honor de mi amante y de mi madre, viviendo a plenitud mi última transformación feral. Saludando con mi aullido a la luna y a la muerte, anunciándoles que pronto estaremos todos con ellas. Sí, Hades ha decidido regresar...

Dejaré esta carta a quien la recoja, será una especie de ayuda que podré darle a quien la obtenga. Mi cuerpo desaparecerá y ya no tendré la suerte seguir viviendo. Seguramente esta persona sabrá lo que debe hacer...

KISHIMONO "SIX"TURE, ESTRELLA OLVIDADA DE LA MUERTE SENTENCIAL)**

por **Ichann** Dom Feb 10 2013, 23:57

**La búsqueda se hacía eterna, todo parecía no tener sentido a medida de que Ichann avanzaba siempre terminaba en el mismo lugar, era como si al caminar mas y mas solo lo que hacía era andar en círculos sin encontrar nada más que una puerta entreabierta. El porfiado Santo de la Corona, sabiendo que todo era una ilusión que al parecer era creada por el Dios del Inframundo, aunque siga indagando más y mas solo encontraba esa puerta.

EL Santo de la Corona dejo de girar en círculos y se dirigió a la entrada de esa puerta tan nombrada, al entrar encontró a otro espectro que lo estaba esperando con ansias de tener una batalla a muerte. Al parecer este espectro tenía algo así como una armadura con un color indescriptible, era una de esas famosas Sapuri que el mismísimo Hades entregaba a sus marionetas más poderosas. El espectro se paró de forma altanera delante de Ichann imponiendo su autoridad pero el Guerrero de la Corona no se dejo amedrentar por tal y por lo que se pudo observar otra nueva técnica había salido del fondo del cosmos corrupto del mismo, la técnica que Ichann conocía como Golpe de Cosmo, fue nombrado así por sus antecesores, ya no tenía su color radiante como el sol mismo sino mas bien poseía un aura oscura que al parecer destruía todo a su paso, al golpear al espectro con su nueva y mortal técnica se podía ver como los ojos de Ichann demostraban un color rojo demoniaco y su rostro macabro demostrando como disfrutaba acabar con ese enemigo.

[TORNEO] Ichann Vs Milo73 Ataque6ssrpg09

Sin importarle que ese sirviente tuviera información que le pudiera servir, lo acabo en un abrir y cerrar de ojos disfrutando a cada instante la agonía de cada una de sus víctimas, al terminar decidió hurgar un poco en esa habitación y encontró una hoja de papel arrojada al descuido...**

por **Milo** Lun Feb 11 2013, 16:04

Parámetro:

()= Personaje secundario.

**(Parece que lo chupó un vampiro y no es para dudarlo. Aunque, de estos personajes se ha dicho todo, menos que tengan semejantes debilidades. De cualquier forma, no se discute alguna excentricidad o vicio desarrollado por ellos.

De que lo dejaron bien chupado, ni sospecha cabe. Apenas una cosita de nada inerme en la acera y, para colmo de males, lo apachurró el último barco que pasaba a esas horas. Los perros noctívagos se acercaron a él, mas su tufo los ahuyentaría porque estaba impregnado de aliento alcohólico. Aquel pinto con sarna fue el primero en olisquearlo, arriscó la nariz e hizo muecas caninas de desaprobación. Luego se fue, untándose a las paredes umbrías y tras él los demás.

Las sombras se marcharon persiguiendo a los perros. La luz de la luna caía formando cubos en las callejuelas. Al lado de un farol corcovado, entre cortinas nebulosas, una luciérnaga se encendía y se apagaba en el contraluz de la bocacalle, dirigiéndose con rumbo a donde estaba el marchito y, al pasar cerca, supo que era el alma de otro hermano consumiéndose en idénticas circunstancias. Después de esfumarse en cada sorbo que succionaron de él, se le tiró a un lado de donde el primero yacía.

Entonces pudo advertir que su compañero de fatalidad tenía señales color púrpura, como las suyas. Al inicio creyó que era sangre, pero más bien eran residuos de carmín, pues seguro se trataba de una bruja y no de un vampiro. Mejor dicho de alguna vampiresa que les produjo esas marcas al prenderlos con sus labios.

Pero alguien se acercó, potencialmente su asesino pensaba él. No dudó en emitir palabra.

- ¿Quién eres? ¿Qué le has hecho a mi compañero?)**

por **Ichann** Vie Feb 15 2013, 00:00

**Todo parecía muy confuso, Después de haber matado a ese espectro Ichann había encontrado una hoja de papel que al parecer tenía algo escrito en ella!!! La carta era algo confusa pero daba a entender que con la llegada de hades vendría el final del mundo, pero al final de dicha carta se podía sentir la fe que había puesto el escritor y al parecer al ser Ichann quien la leyera él tenía que ser el guerrero que acabaría con las maldades del Dios del Inframundo pero será una coincidencia o el que había despertado toda la maldad desde el fondo de su corazón seria quien acabara con la vida de Hades y no proclamarse como el nuevo dios sino como el salvador de MUNDO.

Nada encajaba y al leerla una y otra vez solo hacía que Ichann dudara de sí mismo y empezara a los gritos sin poder entender por qué tuvo que haber encontrado esa carta. Tratando de calmarse y concentrarse en su objetivo, el santo de la corona siguió recorriendo dicho castillo.

Al llegar a otro piso del castillo encontró cuerpos que a simple viste no tenían mas vida, eso parecía no tener coherencia por que la única persona que cambiaba la tranquilidad del lugar era Ichann pero al ver esos cuerpos tirados y ensangrentados no cabía duda de que alguien se le quería adelantar y eso no lo podía permitir. Al subir un piso mas se encontró con un pequeño guardia, al parecer este no portaba una de esas armaduras llamadas sapuri solo se podía distinguir con claridad que no era un espectro con tan solo mirarlos a los ojos y ver que su alma había sido llevada a otro sitio, casi con todo el cuerpo tembloroso se encontraba tirado en un rincón y por cada paso que daba el santo de la corona esta "persona" temblaba mas y mas. Al encontrarse frente a frente Ichann lo tomo por su indefenso cuello y lo levanto, muerto de medio el espectro no podía dejar de gritar y en ese mismo momento Ichann lo miro y se escucharon las siguientes palabras...**

Ichann: -Si tu vida, o lo que queda de ella, te importa empieza a cacarear y cuenta todo lo que está sucediendo en este maldito castillo y ten por seguro que si presiento que me estas mintiendo, te prometo insecto que no temblaras mas solo te carbonizaras por mi **Ichann haciendo aparecer fuego en sus manos**Corona de Fuego...-

por **Milo** Vie Feb 15 2013, 18:59

**(Fue nada más cuestión de verlo para saber que había matado a un hombre. Llegó desencajado y amarillo, y ya no resultó necesario preguntarle nada.

- Nada más espero de ver cómo concluye todo y cuál es el próximo ataúd que se suma a este nicho de vidas desperdiciadas.

- Para consuelo de mi soledad, pronto llegaste, siquiera para hacerme compañía; y aunque a decir de la gente debiéra guardar rencor, es preferible que hagamos las paces. De aquí a la eternidad queda mucho trecho por recorrer, sólo tú sabrás cómo llegar.

Cruzo frente a la iglesia. Las campanas, cada vez más agudas, provocan que las lágrimas desanden, regresen -más allá de la conciencia- al fondo de los remordimientos, a ése dolor hondo que hace tomar el aire a bocanadas, mientras el viento hiela las orejas y penetra resquicios del abrigo. A medida que avanzó, su cuerpo se desvaneció, dejando al otro hombre solo.)**

por **Ichann** Lun Feb 18 2013, 23:04

**Las cosas en el castillo parecían no avanzar, seguir recorriendo ese laberinto parecía eterno, el santo de la corona sabia que seguir ahí seria pérdida de tiempo, ya no sabía qué hacer ni dónde buscar pero una cosa era segura Hades no se encontraba ahí porque antes las amenazas y provocaciones reiteradas de Ichann no había señal alguna de ningún espectro y menos del dios del inframundo.

Al parecer todas las marionetas que se encontraban en dicho lugar ya habían sido asesinadas por el guerrero coroniense y lo único que el tenia como pista era la carta que había encontrada, seguramente leyéndola detenidamente algo iba a encontrar, alguna pista, algún lugar algo que lo pudiera ayudar para encontrar su objetivo y así de una vez por todas terminar con esa sed de maldad que lo carcomía cada vez mas y mas. Volvió atrás en sus pasos y llego a la entrada que en ese momento seria su salida y otra vez se encontraba en la nada misma, sin saber dónde ir el guerrero Ichann opto por seguir su camino pero algo era seguro de alguna forma u otra el objetivo de Ichann sabía que lo estaba buscando, el no podía explicar el por qué o como sabia que eso era cierto pero había algo en su interior que decía que era así.

Ya decesperado y al ver que su búsqueda se hacía imposible, Ichann lleno de ira y desesperación pego un grito en la nada misma que demostraba su ira y frustración.**

Ichann: -MALDITO SEAS HADES, SE VE QUE ERES UN COBARDE Y SOLO ERES PURO HUMO, SI ERES TAN GRANDE COMO LA MITOLOGIA LO INDICA APARECE DE UNA BUENA VEZ...!!!!-

por **Milo** Miér Feb 20 2013, 15:51

**(La luz del farol atraviesa con dificultad las gotas de lluvia, dejando, a su paso, instantáneas joyas que desaparecen al estallar contra el suelo. El cuerpo se desliza, evitando golpear latas, botellas y otras basuras, no quiere ruidos delatores.

Llega al enorme edificio gris y frío, ya familiar. Se escurre por el resquicio de la ventana y se detiene, alegre y cauteloso. Las planchas de cemento, con cadáveres frescos, se extienden ante su vista. Sin problemas quita la sábana que cubre la cara de uno, y come un ojo. El primero de su cena favorita.

Luego, decidió ir a la entrada, y allí lo pudo ver. Entre sollozos y escondidas, sólo se limitó a decir.

-En la oscuridad de la noche se acumulan las sombras y de allí salen seres inconformes que intentan desquitarse con cualquiera, por eso evítala, ya que allí es en donde los malos pensamientos y las peores cosas pueden suceder. -

por **Apu** Miér Feb 27 2013, 16:07

**De pronto la tierra comenzó a temblar. Aquel castillo que parecía tan sólido comenzó a temblar como si fuera un castillo de cartas que es expuesto a la brisa más leve, pronto aquel temblor se extendió hacia el resto del globo. El terror y el pánico se apoderaron del mundo entero, pero dentro de aquel castillo había otras preocupaciones más que de un temblor.

Las catacumbas del castillo empezaron a sufrir rajaduras, tantas eras que se había creado un pozo en el medio de aquel lugar. En el fondo del mismo se podía ver lo que aparentaba ser un sarcófago negro. Parecía tener unas raras inscripciones, como si se tratara de un idioma que nunca nadie hubiera conocido.

Un grupo de jóvenes espectros se lanzan a contemplar la majestuosidad de dicho elemento, pensando en que era un objeto sagrado de su señor se acercan lentamente para agarrarlo y llevarlo frente a Pandora. Grabe fue su error, al acercarse una extraña energía empezó a fluir del interior de aquel artefacto, la misma era cada vez más brillosa, más potente, hasta que enceguecía la vista, en ese momento los espectros se evaporaron, no había quedado ni rastro de ellos o de sus armaduras. De pronto empiezan a aparecer rajaduras dentro de aquel artefacto extraño, comienza a brillar aún más hasta que se rompe, del mismo sale una débil muchacha, su pelo era rojizo como la sangre, su expresión algo serena, aunque mientras iba tomando conciencia su rostro se endurecía cada vez más. Aquella muchacha se incorpora levemente, cuando deja ver una serie de talismanes colgados por todo su cuerpo, cada uno tenía un nombre diferente, ella toca cada uno con especial afecto y devoción hasta que dentro de su pecho saca un colgante con su nombre, el mismo sólo tenía tres letras. Claramente se leía… “GEA”. Estando firmemente de pie, enciende el cosmos de todo su cuerpo y logra comprimirlo en una pequeña espera que coloca entre sus manos, cuyo poder iba creciendo más y más, su cosmos parecía no tener límites.**

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- Humanos después de todos estos siglos aún no han aprendido la lección. Muchas veces hemos creído que tenían el don de discernir entre en bien y el mal, más una vez más de las que hemos pensado eso nos hemos equivocado, Es por eso que hemos confiado en nuestros hijos, los dioses, pero también hemos cometido el mismo error, al parecer los humanos son como unos parásitos, que pueden infectar y alimentarse de su presa, y al igual que estos siempre escogen la presa más grande. Es hora de terminar con nuestro error, aquel que hemos tenido desde un principio, como dioses pigmeos hemos querido hacernos a un lado, abrir paso a una nueva generación, hemos querido liberar el yugo de los humanos para que puedan disertar y tener un albedrío justo, pero nos hemos equivocado, pues el árbol que muere torcido sólo puede estar destinado a caer de joven, lo mismo ha pasado con ellos y con nuestros hijos, los humanos se han corrompido y lo han hecho con ellos también, es hora de que la luz de la claridad y el conocimiento purgue a estas razas, que las cosas sean como fueron, para que todo sea paz y armonía necesita morir para volver a nacer, es hora de iniciar un fin para que todo comience nuevamente. Es hora de pronunciar las míticas palabras… “Más negro que la oscuridad, mas rojo que la sangre, enterrado bajo la marea del tiempo, bajo tu sagrado nombre destruye a toda la oscuridad, destruye a los enemigos que tengo frente a mí... ¡Dark Slave!” -

**Gea lanza aquella bola de energía, la misma penetra en los confines de la tierra, ella cubre su cuerpo con su cosmos haciéndolo arder sin límites, todos los guerreros que poseían un cosmos en aquel planeta sintieron ese poder destructivo, abrazador, no importaba cual fuera su dios, el temor infundado por aquel cosmos no presentaba igual, Athena en el santuario y Poseidón en los mares se arrodillaron en súplicas por una nueva oportunidad, pero ya nada serviría, aquella esfera que Gea había lanzado llegó al núcleo de la tierra.

Todo se volvió borroso, todo el mundo se volvió blanco, las plantas se marchitaron, los mares se evaporaron, el cielo dejó su color celeste para teñirse de un rojo sangriento, y en un abrir y cerrar de ojos, la tierra, el mundo, había estallado y llegado a su fin, todo y todos habían muerto.

Luego de la explosión, se la pudo ver a Gea llorando y lamentándose por la vida de sus hijos perdidos, pero a la vez feliz, porque esa sería la historia de un nuevo comienzo…**

Finalización.

por **Apu** Mar Mar 05 2013, 12:36

Devoluciones:

Para ambos:

Votación del jurado:

Ichann:

Milo73:

por Contenido patrocinado

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