Hades, Dios del Inframundo vs Selene, espectro del Basilisco (Batalla de Rol)
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-Selene-- ESPECTRO
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Fecha de inscripción : 14/01/2012
Re: Hades, Dios del Inframundo vs Selene, espectro del Basilisco (Batalla de Rol)
La oscuridad rodeaba el Inframundo en especial el castillo donde el rey Hades comandaba el ejército de espectro con ayuda de la señorita Pandora, aquello solo indicaba que el resurgimiento de más servidores de lo oscuro despertaban de su letargo para levantarse otra vez en nombre del rey de los muertos y luchar por él pero aun así no eran suficientes. Selene, la espectro que hasta hace poco tiempo había recibido la Surplice de Basilisco caminaba con paso apurado hacia el castillo más específicamente a la recamara del trono de su señor. En su trayecto se encontró con algunos guerreros de bajo rango que simplemente ella ignoro como si no hubiera nadie ahí parada a su lado. Sin duda eso les resultaba ofensivo a tales espectros que dedicaron una mirada llena de odio y ansias de matar como un espectro debía ser.
Selene giro levemente su rostro y los observo con frialdad no tan característica de su personalidad para ello se detuvo un segundo y tras aquella guerra de miradas entre espectros, cada uno siguió su camino sin decir vocablo alguno, la joven siguió su camino por el sendero oscuro y tétrico del lugar, no sabia que era lo que la impulsaba a ver a su señor pero sentía que debía hacerlo en este momento en que la Guerra Santa contra el Santuario de Athena estaba cerca de comenzar después de una gran espera de casi cerca de 273 años o aproximadamente.
El comienzo de esta guerra debía ser la victoria absoluta del Inframundo sobre la tierra y así poder cubrir este banal mundo en la oscuridad de la muerte y el sufrimiento, ese era el deseo de su señor por consiguiente ese era el deseo de todo espectro o santo renegado que pertenecía al ejercito Inframundano. Basilisco había se encontraba parada frente a una puerta de roble de color negro azabache, dudo unos instantes en ingresar pero ya estaba ahí y seguramente la deidad de lo oscuro notó su presencia desde que había puesto un solo pie en el recinto divino de Hades.
Selene giro levemente su rostro y los observo con frialdad no tan característica de su personalidad para ello se detuvo un segundo y tras aquella guerra de miradas entre espectros, cada uno siguió su camino sin decir vocablo alguno, la joven siguió su camino por el sendero oscuro y tétrico del lugar, no sabia que era lo que la impulsaba a ver a su señor pero sentía que debía hacerlo en este momento en que la Guerra Santa contra el Santuario de Athena estaba cerca de comenzar después de una gran espera de casi cerca de 273 años o aproximadamente.
El comienzo de esta guerra debía ser la victoria absoluta del Inframundo sobre la tierra y así poder cubrir este banal mundo en la oscuridad de la muerte y el sufrimiento, ese era el deseo de su señor por consiguiente ese era el deseo de todo espectro o santo renegado que pertenecía al ejercito Inframundano. Basilisco había se encontraba parada frente a una puerta de roble de color negro azabache, dudo unos instantes en ingresar pero ya estaba ahí y seguramente la deidad de lo oscuro notó su presencia desde que había puesto un solo pie en el recinto divino de Hades.
El sonido de la puerta al abrirse anuncio la presencia de Basilisco en aquella sala oscura, la joven peli lila avanzo con paso lento muy diferente al que había empleado minutos antes, en ese pequeño trayecto no se atrevió a mirar el rostro de Hades en ningún momento ya que no se creía digna de tal acto por lo que el piso en esos momentos era lo mas interesante del mundo que mantenía su mirada fija en el suelo cubierto de baldosas negras, se detuvo frente a él a unos cuantos metros de separación y con suma delicadeza se inclino ante el apoyando su rodilla izquierda sobre el frio piso, de la misma forma su palma izquierda imito aquella acción mientras su otra palma se situaba sobre su rodilla flexionada, todos sus movimientos fueron realizados aun sin mirar a su señor.
El contraste que se apreciaba entre la lechosa piel de Selene y el piso sin duda era algo que podía notarse claramente así como la lealtad y la obediencia que manifestaba con sus actos carentes de hostilidad y de sarcasmo, cualidades que caracterizaban a la espectro de Basilisco, pasado unos minutos sus labios se separaron ligeramente para dejar escuchar su voz modesta y tranquila. Sus cabellos lilas cayeron sobre su frente cubriendo sus ojos azules llenos de solemnidad.
-Pido, disculpe mi atrevimiento de presentarme ante usted sin ser convocada, pero creí necesario hacerlo debido a la situación que el Inframundo tendrá que afrontar… Tomando en cuenta que aun falta para que varios espectros despierten de su letargo. No desconfió de usted en lo absoluto mi señor y pido nuevamente disculpe mi osadía si merezco castigo alguno lo aceptare sin queja alguna-
Selene termino de hablar, aguardando en el silencio a la espera de las palabras de Hades, mientras mantenía la misma postura antes de dirigirse ante él y cerrando sus ojos en el proceso.
- Spoiler:
El contraste que se apreciaba entre la lechosa piel de Selene y el piso sin duda era algo que podía notarse claramente así como la lealtad y la obediencia que manifestaba con sus actos carentes de hostilidad y de sarcasmo, cualidades que caracterizaban a la espectro de Basilisco, pasado unos minutos sus labios se separaron ligeramente para dejar escuchar su voz modesta y tranquila. Sus cabellos lilas cayeron sobre su frente cubriendo sus ojos azules llenos de solemnidad.
-Pido, disculpe mi atrevimiento de presentarme ante usted sin ser convocada, pero creí necesario hacerlo debido a la situación que el Inframundo tendrá que afrontar… Tomando en cuenta que aun falta para que varios espectros despierten de su letargo. No desconfió de usted en lo absoluto mi señor y pido nuevamente disculpe mi osadía si merezco castigo alguno lo aceptare sin queja alguna-
Selene termino de hablar, aguardando en el silencio a la espera de las palabras de Hades, mientras mantenía la misma postura antes de dirigirse ante él y cerrando sus ojos en el proceso.
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-Selene-- ESPECTRO
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Re: Hades, Dios del Inframundo vs Selene, espectro del Basilisco (Batalla de Rol)
**El día se tornó oscuro y tenebroso con una luna que apenas podía dirigir un par de luminosos rayos de luz hacia el interior del Castillo. El aire era denso y se sentía un ambiente que estaba cargado de dolor, sufrimiento y odio, mucho odio. Este Castillo es un sitio protegido por el Dios del Inframundo y que se eregía en el Planeta Tierra, aunque está conectado con el Inframundo.
Habitualmente en este Castillo se puede vislumbrar muchos Espectros que custodian su cuidado y se encargan de no dejar pasar a ningún intruso, sino que simplemente ejecutan al desconocido sin preguntar. Es que pisar este recinto sin pertenecer a las filas de Hades produce la muerte más dolorosa y sufrida que puede existir.
Pero más profundamente, se puede encontrar un pequeño recinto. La puerta de entrada es imponente y majestuosa, teniendo detalles de demonios incrustados en cada hendija de los zócalos que complementaban el armado de la puerta. Una fina capa de neblina inundaba la entrada y apenas la luz brillaba allí.
Al ingresar, se podía divisar un suelo totalmente oscuro, pilares alrededor con inscripciones de frases que incitaban a la lealtad del Señor del Inframundo y unos pequeños escalones que conducían directamente al lugar en el cual yacía un gran trono. Este lugar se encontraba completamente tapado por unas cortinas que contenían una gigante imagen de una estrella impregnada de sangre.
Más allá de las cortinas, se llegaba al trono. Un trono que intimidaba al más valeroso debido a su conformado. Un gran ángel de la muerte se ubicaba en la cabeza y unas enormes alas, similares a las flamas que produce un fuego, oscurecían más el sitio. Apenas se podía ver a quien se sentáse allí.
Sin dudas, luego de un largo tiempo, Hades el mismo Dios del Inframundo se encontraba ubicado en ese lugar. Sentado con sus ojos cerrados, se podía ver ese largo cabello negro tapando su rostro y apenas dejando su boca libre. Portaba una túnica oscura con detalles en rojo carmesí simulando el color de la sangre. Sin emitir ninguna palabra, se podía sentir un miedo insoportable. Ya la sola presencia del Dios genera un sentimiento de pavor imposible de esconder.
Y allí estaba la Espectro de Basilisco, arrodillada en reverencia a su máximo líder. Sin levantar su cabeza, con su mirada puesta en el suelo, se llenó de valor y preguntó algo a su máxima deidad**
- Basilisco. Así que el nuevo portador de la Surplice es una mujer. -En ese momento Hades mueve un dedo-**De repente, el cosmo de la dama comenzó a mermar de una forma muy extraña, pero elevandose a cada segundo**
- Tienes una aptitud cósmica interesante. Eso es lo que tienen que tener todos los Espectros y que aún no lo logran obtener. Esa es la consecuencia de su letargo y que sólo se acabará cuando su odio esté en el punto máximo. -Hades deja de mover el dedo-
**Luego, una leve mirada del Dios del Inframundo se instaló por unos momentos en la Espectro**
- Las mujeres son débiles en los sentimientos. Su fragilidad es constante y eso repercute en la mentalidad a la hora de cumplir un objetivo. Es que, son humanos y como tales no pueden manejar los sentimientos. ¿Por qué debo confiar en tí? -Pregunta con mucho hincapié-
Habitualmente en este Castillo se puede vislumbrar muchos Espectros que custodian su cuidado y se encargan de no dejar pasar a ningún intruso, sino que simplemente ejecutan al desconocido sin preguntar. Es que pisar este recinto sin pertenecer a las filas de Hades produce la muerte más dolorosa y sufrida que puede existir.
Pero más profundamente, se puede encontrar un pequeño recinto. La puerta de entrada es imponente y majestuosa, teniendo detalles de demonios incrustados en cada hendija de los zócalos que complementaban el armado de la puerta. Una fina capa de neblina inundaba la entrada y apenas la luz brillaba allí.
Al ingresar, se podía divisar un suelo totalmente oscuro, pilares alrededor con inscripciones de frases que incitaban a la lealtad del Señor del Inframundo y unos pequeños escalones que conducían directamente al lugar en el cual yacía un gran trono. Este lugar se encontraba completamente tapado por unas cortinas que contenían una gigante imagen de una estrella impregnada de sangre.
Más allá de las cortinas, se llegaba al trono. Un trono que intimidaba al más valeroso debido a su conformado. Un gran ángel de la muerte se ubicaba en la cabeza y unas enormes alas, similares a las flamas que produce un fuego, oscurecían más el sitio. Apenas se podía ver a quien se sentáse allí.
Sin dudas, luego de un largo tiempo, Hades el mismo Dios del Inframundo se encontraba ubicado en ese lugar. Sentado con sus ojos cerrados, se podía ver ese largo cabello negro tapando su rostro y apenas dejando su boca libre. Portaba una túnica oscura con detalles en rojo carmesí simulando el color de la sangre. Sin emitir ninguna palabra, se podía sentir un miedo insoportable. Ya la sola presencia del Dios genera un sentimiento de pavor imposible de esconder.
Y allí estaba la Espectro de Basilisco, arrodillada en reverencia a su máximo líder. Sin levantar su cabeza, con su mirada puesta en el suelo, se llenó de valor y preguntó algo a su máxima deidad**
- Basilisco. Así que el nuevo portador de la Surplice es una mujer. -En ese momento Hades mueve un dedo-**De repente, el cosmo de la dama comenzó a mermar de una forma muy extraña, pero elevandose a cada segundo**
- Tienes una aptitud cósmica interesante. Eso es lo que tienen que tener todos los Espectros y que aún no lo logran obtener. Esa es la consecuencia de su letargo y que sólo se acabará cuando su odio esté en el punto máximo. -Hades deja de mover el dedo-
**Luego, una leve mirada del Dios del Inframundo se instaló por unos momentos en la Espectro**
- Las mujeres son débiles en los sentimientos. Su fragilidad es constante y eso repercute en la mentalidad a la hora de cumplir un objetivo. Es que, son humanos y como tales no pueden manejar los sentimientos. ¿Por qué debo confiar en tí? -Pregunta con mucho hincapié-
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