La historia de Sendo antes de llegar al santuario
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La historia de Sendo antes de llegar al santuario
- Los acontecimientos que pretendó narrar son de hace un par de meses atrás. Yo Sendo, el actual santo plateado del cuervo llevó alrededor de un mes o quizás un poco más entrenandome en el santuario que podrían haber sido un año, incluso un decenio, por lo largo que se me ha echo, pasaron, una vez más, a toda velocidad por mi cabeza mientras me tambaleaba y mi mente daba vueltas, desde mi último combate hasta el templo que he de proteger.
Recuerdo, aunque me parecía un sueño, que antes de venir a este lugar tan maravilloso yo estaba en Japón defendiendo a los inocentes de las bandas delictivas de la zona. Bueno yo también tuve una de esas bandas, pero la finalidad con que la creé fue esa, apartar a las demás bandas de las personas inocentes. Cierto día, en mi paseo rutinario de las siete y treinta, apareció él. Su nombre era Mamoru. -
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Re: La historia de Sendo antes de llegar al santuario
Sendo recordando en sus pensamientos
[Al acercarme, Mamoru había empezado a brillar, pero con una luz acogedora de una tonalidad dorada. En sus brazos llevaba un pequeño bultito y a sus espaldas una caja de oro, que se veía bastante pesada. Yo pensé que ese tipo había robado algo, pues su apariencía no mostraba que fuese del lugar ni menos que tuviera como alimentarse ni donde vivir. La verdad pensé que era un vagabundo que andaba robando algo que comer.]
—Saludos, extraño—me dijo. Llevo diez meses buscando un lugar donde puedan acoger a este pequeño bebé. Lo he tenido que tomar de su lugar y llevarmelo.
**Yo estaba en lo cierto, pues el era un ladrón. Más bien un secuestrador, pues se había llevado a ese bebé sin permiso y a hurtadillas, además no se atrevió a levantar la vista.**
—Muéstrame al pequeño que llevas en tus brazos!!, ¿De donde lo has tomado?, sería mejor que lo entregues a donde pertenece antes de que le pase algo.-le dije
**Con humildad, ese tipo extraño me la ofreció.**
—Ah!!. No hombre, yo no puedo cuidar de ese bebé. No es mío y además no se a donde pertenece—le respondí a tal ofrecimiento, mientras su mano acarició el rostro del bebé. Resplandecía y latía. Sus ojos se clavaron en él.
- Joven, si tu me derrotas en un combate te diré a donde pertenece y que es lo que ocurrirá si lo devuelves ahí.-
me dijo mientras me miraba fijamente a los ojos
**Ladeó la cabeza, como si estuviese reflexionando sobre algo, mientras dejaba al pequeño a un lado. Al levantar la vista, creí ver un atisbo de sonrisa en su rostro iridiscente.**
—¿Quién eres? - le dije. Sabes, en estos lugares soy el muchacho más fuerte y en tu estado no creo que seas rival para mí, pero aceptaré tu reto -
—Me llamó Mamoru y vengó desde Grecia. Salve a este pequeño de sus padres que no lo merecían y que lo maltrataban, a pesar de ser solo un bebé. - fue lo que pronunció antes de ponerse en guardia
**Yo me sorprendí. ¿Como era posible que hubiese venido desde tan lejos, solo y caminando?, ahora todo me quedaba más claro acerca de su aspecto. Aún así el me había retado a un combate y un verdadero hombre no escapa de los retos.
El comienzó del combate fue de tanteo sin que ninguno encajara ningún golpe severo. Sirvió para medir las distancias y conocer los movimientos del oponente. Después comenzó a suceder lo malo, pues recibí dos directos de derecha que me dejaron noqueado en el asfalto de la calle, pero tras darse vuelta Mamoru, logre recuperarme y soltar una serie de uno-dos que acabaron en un gancho de izquierda que Mamoru sin mayor esfuerzo rechazó. **
**Observe que la caja de oro tenía un grabado con la forma de un León en uno de sus costados. No tenía idea que significaban sus palabras, por lo que me quede un momento reflexionando, hasta que él me sorprendió con un golpe cruzado seguido de un gancho en el hígado que me hizo añicos, pero en ese momento conteste con toda mi fuerza, soltando una serie de directos que no hicieron mella en mi rival, ya que este jugaba con la distancia larga y los esquivó todos.
Me veía perdedor en el combate, por lo que seguí luchando hasta el último segundo, pero un despiste en la guardia me produjo un golpe directo en la cara que e hizo besar nuevamente el asfalto. Su golpe fue con tanto poder que ya no pude levantarme. Nunca antes había sido golpeado por ninguno de mis rivales, ni mucho menos derrotado tan abruptamente, pero Mamoru me había derribado en dos oportunidades y yo no pude ni siquiera tocarlo.**
- Grecia. Debes ir a Grecia y volverte más fuerte. Cuando llegues allá y encuentres el lugar de donde provengo entonces deberás esforzarte por entrar. JAJAJAJAJAJAJAJA, tienes talento, pero con ese nivel jamás me derrotarás ni podrás proteger a nadie. Eres un chico de buen corazón y por eso te aconsejo que viajes a ese país tan lejano. Cuando te hayas convertido en alguien más fuerte buscame. Hasta entonces joven amigo. -
**Luego de eso, Mamoru tomó su caja de oro y se la colgó en su hombro y luego tomó al bebé nuevamente en brazos. Camino en la dirección por donde había llegado yo, hasta que desapareció sin dejar rastro. Su concejo me quedó dando vueltas y vueltas en la cabeza, por eso al otro día viaje a Grecia como Mamoru me había dicho, sin saber lo que allí me esperaba**
—Saludos, extraño—me dijo. Llevo diez meses buscando un lugar donde puedan acoger a este pequeño bebé. Lo he tenido que tomar de su lugar y llevarmelo.
**Yo estaba en lo cierto, pues el era un ladrón. Más bien un secuestrador, pues se había llevado a ese bebé sin permiso y a hurtadillas, además no se atrevió a levantar la vista.**
—Muéstrame al pequeño que llevas en tus brazos!!, ¿De donde lo has tomado?, sería mejor que lo entregues a donde pertenece antes de que le pase algo.-le dije
**Con humildad, ese tipo extraño me la ofreció.**
—Ah!!. No hombre, yo no puedo cuidar de ese bebé. No es mío y además no se a donde pertenece—le respondí a tal ofrecimiento, mientras su mano acarició el rostro del bebé. Resplandecía y latía. Sus ojos se clavaron en él.
- Joven, si tu me derrotas en un combate te diré a donde pertenece y que es lo que ocurrirá si lo devuelves ahí.-
me dijo mientras me miraba fijamente a los ojos
**Ladeó la cabeza, como si estuviese reflexionando sobre algo, mientras dejaba al pequeño a un lado. Al levantar la vista, creí ver un atisbo de sonrisa en su rostro iridiscente.**
—¿Quién eres? - le dije. Sabes, en estos lugares soy el muchacho más fuerte y en tu estado no creo que seas rival para mí, pero aceptaré tu reto -
—Me llamó Mamoru y vengó desde Grecia. Salve a este pequeño de sus padres que no lo merecían y que lo maltrataban, a pesar de ser solo un bebé. - fue lo que pronunció antes de ponerse en guardia
**Yo me sorprendí. ¿Como era posible que hubiese venido desde tan lejos, solo y caminando?, ahora todo me quedaba más claro acerca de su aspecto. Aún así el me había retado a un combate y un verdadero hombre no escapa de los retos.
El comienzó del combate fue de tanteo sin que ninguno encajara ningún golpe severo. Sirvió para medir las distancias y conocer los movimientos del oponente. Después comenzó a suceder lo malo, pues recibí dos directos de derecha que me dejaron noqueado en el asfalto de la calle, pero tras darse vuelta Mamoru, logre recuperarme y soltar una serie de uno-dos que acabaron en un gancho de izquierda que Mamoru sin mayor esfuerzo rechazó. **
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- ¿Sabes porque no puedes tocarme?, pues te lo diré - Dijó Mamoru. - Allá en Grecia yo soy conocido como uno de los hombres más poderosos. Esta caja de oro es prueba de ello, pero no utilizaré su contenido en tí, pues tu no eres tan fuerte como para que use tal objeto. Además quizás no sepas muchas cosas como por ejemplo la fuente del poder que poseo. -**Observe que la caja de oro tenía un grabado con la forma de un León en uno de sus costados. No tenía idea que significaban sus palabras, por lo que me quede un momento reflexionando, hasta que él me sorprendió con un golpe cruzado seguido de un gancho en el hígado que me hizo añicos, pero en ese momento conteste con toda mi fuerza, soltando una serie de directos que no hicieron mella en mi rival, ya que este jugaba con la distancia larga y los esquivó todos.
Me veía perdedor en el combate, por lo que seguí luchando hasta el último segundo, pero un despiste en la guardia me produjo un golpe directo en la cara que e hizo besar nuevamente el asfalto. Su golpe fue con tanto poder que ya no pude levantarme. Nunca antes había sido golpeado por ninguno de mis rivales, ni mucho menos derrotado tan abruptamente, pero Mamoru me había derribado en dos oportunidades y yo no pude ni siquiera tocarlo.**
- Grecia. Debes ir a Grecia y volverte más fuerte. Cuando llegues allá y encuentres el lugar de donde provengo entonces deberás esforzarte por entrar. JAJAJAJAJAJAJAJA, tienes talento, pero con ese nivel jamás me derrotarás ni podrás proteger a nadie. Eres un chico de buen corazón y por eso te aconsejo que viajes a ese país tan lejano. Cuando te hayas convertido en alguien más fuerte buscame. Hasta entonces joven amigo. -
**Luego de eso, Mamoru tomó su caja de oro y se la colgó en su hombro y luego tomó al bebé nuevamente en brazos. Camino en la dirección por donde había llegado yo, hasta que desapareció sin dejar rastro. Su concejo me quedó dando vueltas y vueltas en la cabeza, por eso al otro día viaje a Grecia como Mamoru me había dicho, sin saber lo que allí me esperaba**
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Presley- MODERADOR
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Re: La historia de Sendo antes de llegar al santuario
OFF: Es mi primer post en esta sección, creo que he desarrollado lo mejor que pude esta parte de la historia de mi personaje. No sean tan duros con las criticas por favor. Si hay algo en que pueda mejorar diganlo de buena forma plis. saludos
Presley- MODERADOR
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Re: La historia de Sendo antes de llegar al santuario
Bien... un relato bastante cortito, pero sencillo. Como para mejorar... hay bastante, controlar la orgografía, usar mas y mejor los signos de puntuación y exclamación ya que pueden darle fuerza a un relato o sacarle todo el climax que uno se esmeró al ponerle cuando pensó la historia, lo mismo al uso de TODO MAYUSCULA para resaltar algo. Si bien es muuuuy cortito tenés que tratar de que la historia sea un poco más larga, pero no por eso tiene que ser repeitiva y aburrida, por ahi si reescribis esta misma historia, pero describiendo más las acciones, sentimientos, paisajes sería mucho más larga y te engancharía mucho mñas al leerla. La historia Mala, no es, pero sí podria hacer sido mas desarrollada para hacerla más interesante. por ser el primer rol está bastante bien. respetaste la semántica del rol y aunque haya saido muy corto, al leerlo uno queda enganchado con el recuerdo y quiere saber más. Felicidades y a seguir mejorando.
Nota: 6 - 2.000 Monedas y 100 Exp
Nota: 6 - 2.000 Monedas y 100 Exp
Apu- ÁNGEL CAÍDO
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